Dudan si el periodista francés desaparecido este en poder de las FARC
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, adelantó algunas sospechas. "No estoy seguro de si lo tienen o no lo tienen. No puedo dar certeza", dijo.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, insistió en que su administración no tiene la certeza de que el periodista francés Romeo Langlois, desaparecido desde el sábado pasado en el sur del país, esté en poder de las FARC.
Langlois desapareció en medio de un combate entre una patrulla combinada del Ejército y la Policía y una columna de las FARC en la selva del departamento de Caquetá, y la guerrilla se atribuyó su secuestro.
El reportero del canal de televisión France 24 tenía permiso para acompañar a las autoridades en una operación antinarcóticos cuando insurgentes de la principal organización guerrillera colombiana emboscaron a los uniformados.
Según militares presentes en el combate, Langlois, herido en el brazo izquierdo, se quitó el casco y el chaleco que le había dado el Ejército y encaró hacia la zona de la que provenían los disparos de las FARC gritando que era periodista.
Aunque Santos dijo poco después que su gobierno tenía "indicios claros" de que el reportero estaba en manos de las FARC y luego una supuesta guerrillera se atribuyó el secuestro, para el Ejecutivo no está confirmado que el francés esté secuestrado.
"No estoy seguro de si lo tienen o no lo tienen. No puedo dar certeza. Las Fuerzas Militares, la Inteligencia tienen indicios, pero no estamos seguros de que las FARC lo tengan", insistió anoche el mandatario, que aseguró que si efectivamente lo tiene la guerrrille, debe liberarlo.
"Si lo tienen las FARC, que lo suelten rápido, porque bajo ningún parámetro este periodista era un combatiente. No puede ser bajo ningún parámetro considerado como un prisionero de guerra", afirmó.
Una mujer que se identificó como integrante del frente 15 de las FARC se comunicó por teléfono con periodistas para leer un comunicado en el que ese grupo se atribuía el secuestro y catalogaba a Langlois como un "prisionero de guerra".
Sin embargo, las autoridades no tienen certeza de que en efecto Langlois esté en poder de guerrilleros, porque las FARC suelen hacer pronunciamientos a través de Internet, firmados por su cúpula de mando, y no mediante mandos medios que se comunican con periodistas.
Ayer, la ex senadora Piedad Córdoba, intermediaria en varios procesos de liberaciones unilatrales, le pidió a la guerrilla que confirme si Langlois estaba en su poder.
Langlois desapareció en medio de un combate entre una patrulla combinada del Ejército y la Policía y una columna de las FARC en la selva del departamento de Caquetá, y la guerrilla se atribuyó su secuestro.
El reportero del canal de televisión France 24 tenía permiso para acompañar a las autoridades en una operación antinarcóticos cuando insurgentes de la principal organización guerrillera colombiana emboscaron a los uniformados.
Según militares presentes en el combate, Langlois, herido en el brazo izquierdo, se quitó el casco y el chaleco que le había dado el Ejército y encaró hacia la zona de la que provenían los disparos de las FARC gritando que era periodista.
Aunque Santos dijo poco después que su gobierno tenía "indicios claros" de que el reportero estaba en manos de las FARC y luego una supuesta guerrillera se atribuyó el secuestro, para el Ejecutivo no está confirmado que el francés esté secuestrado.
"No estoy seguro de si lo tienen o no lo tienen. No puedo dar certeza. Las Fuerzas Militares, la Inteligencia tienen indicios, pero no estamos seguros de que las FARC lo tengan", insistió anoche el mandatario, que aseguró que si efectivamente lo tiene la guerrrille, debe liberarlo.
"Si lo tienen las FARC, que lo suelten rápido, porque bajo ningún parámetro este periodista era un combatiente. No puede ser bajo ningún parámetro considerado como un prisionero de guerra", afirmó.
Una mujer que se identificó como integrante del frente 15 de las FARC se comunicó por teléfono con periodistas para leer un comunicado en el que ese grupo se atribuía el secuestro y catalogaba a Langlois como un "prisionero de guerra".
Sin embargo, las autoridades no tienen certeza de que en efecto Langlois esté en poder de guerrilleros, porque las FARC suelen hacer pronunciamientos a través de Internet, firmados por su cúpula de mando, y no mediante mandos medios que se comunican con periodistas.
Ayer, la ex senadora Piedad Córdoba, intermediaria en varios procesos de liberaciones unilatrales, le pidió a la guerrilla que confirme si Langlois estaba en su poder.