¿Dolarizar o pesificar?

Fabián Medina

Economista.

Siempre en nuestro país esta el eterno dilema de dolarizar o pesificar nuestra economía, aunque siempre debemos entender cuáles son los parámetros para decidir como encaminar nuestra decisión.

Para decidir dolarizar o no tenemos que tener en cuenta una serie de factores

1. ¿Qué podemos producir y en qué nivel? Para entender esto es muy necesario saber cuáles son los sectores más fuertes de producción, en nuestro caso podemos producir en nivel de escala/serie tanto alimentos manufacturados como combustible convencional puesto que poseemos los elementos básicos para ellos.
2. ¿Cuáles son las ventajas comparativas con respecto al mundo? Aunque sea paradojal, los niveles de devaluación sufrida por nuestro país entre 2015 y 2019 nos hace plenamente competitivos en pesos con respecto al mundo SIN NECESIDAD de recurrir a ajustes salariales, con lo que los trabajadores no solo no tienen que restringir sus ingresos sino que también podrán consumir en cantidades en el momento postpandemia/postcuarentena.
3. Necesidad de trabajo en la postcuarentena. Para eso es imprescindible poseer una población sana y mientras dure la pandemia mantener la cuarentena para tener como objetivo final al salir del aislamiento obligatorio poder volver a producir sin ningún tipo de problemática
4. ¿Quiénes tienen intereses en una u otra situación? En la pesificación están siempre interesados quienes reconocen que nuestra economía se maneja en pesos en el 90% de su totalidad, tienden a generar recursos sanos y reconocen que en estos momentos la economía posee las fronteras cerradas y por un tiempo largo va a subsistir ello, incluso más allá del aislamiento; mientras que en el lado de la dolarización se encuentran quienes poseen mayoritariamente desconocimiento de la realidad por encontrarse tras un escritorio, quienes se manejan con las grandes corporaciones, quienes tienen fondos en el exterior o poseen empresas financieras en el exterior que generalmente no declararon ante la AFIP-DGI como en el caso de las 950 cuentas que llegaron al pais desde la OCDE en 2017 y recién se comenzaron a verificar a principios de este mes de abril.
5. ¿Cómo hacemos para ser competitivos? Tenemos si o si que pesificar los costos totales de los distintos procesos de producción, con lo cual estamos en ventaja ante el resto del mundo que sigue con su costeo tradicional y usamos -como expresamos anteriormente- a nuestro favor la brutal devaluación que sufrió nuestra población

Con todo lo anteriormente expresado, la decisión a tomar no es muy difícil de tomar e indudablemente la única posibilidad que nos queda es PESIFICAR la economía en su totalidad desde servicios públicos, transporte, combustibles, costos totales de procesos de producción y valores de venta en el mercado interno.  Todo lo demás opera contra el futuro de nuestra población y por supuesto de nuestro país.