Día de marchas y reclamos por la muerte de Mariano Ferreyra
Con críticas al Gobierno nacional, miles de militantes de organizaciones sociales y políticas de izquierda clausuraron en la Plaza de Mayo una jornada nacional de protesta en repudio del asesinato de Mariano Ferreyra y pidieron "juicio y castigo" para los responsables.
Los reclamos por la muerte del joven militante del Partido Obrero y la FUBA Avellaneda tuvieron réplicas durante todo el día y en distintos puntos de la Ciudad y el Gran Buenos Aires, con cortes en la autopista Panamericana e incluso las vías del ferrocarril Roca, donde ocurrió el trágico episodio.
Un momento de tensión tuvo lugar con el arribo de la columna más importante frente a la Casa de Gobierno, cuando un grupo de manifestantes de la agrupación Quebracho, con sus caras tapadas, avanzó hacia las vallas que dividen a la Plaza y comenzó a golpearlas con palos, desafiando a los efectivos de Policía que custodiaban el lugar que sólo contuvieron el cerco.
Asimismo, en el inicio de la movilización, dos sectores de la izquierda se enfrentaron a golpes de puño y empujones, porque uno de ellos pretendió adelantarse en la columna.
Las distintas agrupaciones y partidos de izquierda encabezaron la marcha con una gran bandera en el frente que pidió por el "juicio y castigo" a los responsables del crimen del joven de 23 años.
En la primera línea de la columna se pudo ver a los familiares de Ferreyra visiblemente dolidos por la situación, junto a los representantes más significativos de la izquierda en la Argentina, como el diputado nacional de Proyecto Sur Fernando "Pino" Solanas, la dirigente del MST Vilma Ripoll y Néstor Pitrola (Polo Obrero).
Las principales consignas de la marcha fueron críticas hacia la presidente Cristina Kirchner, a quien acusaron de permitir "la violencia y burocracia sindical" que según su interpretación, derivó en la muerte del joven militante.
También apuntaron contra el titular de la Unión Ferroviaria, José Pedraza.
"Han pasado 20 horas y no hay nadie preso por un crimen que ha sido filmado por toda la televisión", aseguró el dirigente del Partido Obrero Jorge Altamira, quien habló en nombre de la familia de Ferreyra.
También participaron de la manifestación la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), distintas organizaciones docentes, sindicalistas de Kraft, subtes y trenes, y empleados estatales, entre otros.
Las columnas llegaron a la Plaza de Mayo desde distintos puntos de la Ciudad, como el Congreso de la Nación y el cruce de las avenidas Callao y Corrientes.
Según los organizadores, desde el escenario montado sobre el trailer de un camión de grandes dimensiones, hubo unas 60 mil personas en la manifestación central.
Allí también se leyeron diversas cartas de apoyo, como las de la presidente de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, la Juventud Sindical Peronista, la Legislatura de Buenos Aires y la
Asamblea Ciudadana de Gualeguaychú.
Las protestas en repudio a la muerte de Mariano Ferreyra se habían iniciado bien temprano, cuando trabajadores de la empresa Kraft cortaron la Panamericana y luego iniciaron una marcha hacia la Capital para exigir castigo a los culpables del crimen.
El corte, que involucró ambas manos de la autopista, comenzó a las 6:30 en el kilómetro 35 del ramal Escobar, cerca de la avenida Henry Ford, y fue decidido a última hora del miércoles durante una asamblea en la que también se resolvió adherir al paro nacional al que convocó la CTA.
En tanto, militantes de organizaciones de izquierda se concentraron durante la mañana en la Avenida Pavón, a la altura de la estación de trenes de Avellaneda y luego cortaron las vías del tren Roca, en la zona cercana al lugar donde murió el joven Ferreyra, del Partido Obrero.