Detuvieron al primer sospechoso por el crimen de la mujer asesinada en Castelar: tenía el celular de la víctima
El detenido fue identificado como Diego Fernando Tevez, tiene 40 años y fue descubierto por poseer el celular robado de la víctima. La mujer fue asesinada de un tiro en un asalto cuando llegaba a su casa.
Un hombre de 40 años fue detenido en la localidad de El Palomar por ser sospechoso del crimen de María Lucrecia Arias, la mujer asesinada frente a su hija durante un asalto mientras llegaba a su casa en Castelar.
De acuerdo a lo informado por Télam, se descubrió el celular de la víctima en una vivienda de la misma localidad donde se encontraba el acusado, identificado como Diego Fernando “El Gordo” Tevez.
“No teníamos en claro en qué momento ni cómo se lo sacaron, pero sabíamos que le habían robado el celular a la víctima. Pese a que le habían cambiado la línea, logramos rastrear y recuperar el teléfono que estaba activo y funcionando con otra tarjeta SIM”, explicó una fuente judicial al medio citado.
Por el momento, el detenido será imputado por dos cargos: por un lado, por matar para ocultar otro delito y lograr la impunidad, y por “encubrimiento agravado”, es decir, por tener en su poder el celular, un objeto robado a la víctima.
En las últimas horas, Matías Rapazzo, el fiscal a cargo del caso y miembro de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 de Morón, junto a los detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI), revelaron que tienen en la mira a una banda del complejo habitacional Ejército de los Andes de Ciudadela, más conocido como “Fuerte Apache”.
Cómo fue el crimen de María Lucrecia Arias
El dramático episodio ocurrió cerca de las 23:30 en la intersección de las calles San Nicolás y Salcedo, partido de Morón, cuando María Arias, de 50 años, llegaba a su casa. Fue sorprendida por cuatro delincuentes armados en un auto negro, que quisieron robarle su camioneta Suran.
Según las primeras informaciones, la víctima tardó en quitarse el cinturón de seguridad y los delincuentes le dispararon sin mediar palabra. Una bala le atravesó el pecho y murió en el acto. Los ladrones se dieron a la fuga.
Vecinos reportaron a TN que escucharon dos disparos. Según se pudo establecer, la única cámara de seguridad de la cuadra estaba tapada por un árbol.
La Policía llegó a los pocos minutos al lugar junto a una ambulancia del SAME, pero solo pudieron constatar su muerte.
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