Despenalización de la marihuana: no más presos por cultivar

La escena se repitió en distintos puntos del país como así también en las principales ciudades del mundo, donde millones de personas de diferentes edades, distintos estratos socio-culturales y diversos conceptos sobre la ideal regulación del canabbis, coinciden en que su consumo personal no puede ser delito y por lo tanto carcelable.

Se calcula que unas 190 millones de personas consumen marihuana en el mundo, según estimaciones desactualizadas de las Naciones Unidas de 2010. En total, 27 países han despenalizado o legalizado el cannabis, o bien no tienen ningún tipo de disposición adoptada como es el caso de Corea del Norte, y prácticamente todos los países tienen leyes pertinentes al consumo, cultivo, posesión y venta.

El inminente consumo, los estudios alternativos que avalan su uso medicinal o terapéutico y el sistemático fracaso de las políticas prohibicionistas y policiales frente al narcotráfico, evidencian la necesidad de cambiar la regulación.

Lejos de la imagen distópica de libertinaje anárquico preferida por los más conservadores para eliminar el dialogo al respecto, un país que despenaliza el consumo personal de marihuana brinda una mayor protección a sus ciudadanos.

Las sociedades han cambiado como así también el acceso a la información y tarde o temprano, las leyes deben adecuarse al presente histórico que les compete.

Una sociedad informada con conocimientos completos y realistas sobre drogas y un consumo responsable, sólo pueden ser entendidos en el marco de una sociedad que no niegue, calle y prohíba.

Por todo esto, considero fundamental la despenalización del consumo de canabbis para consumo personal.