Desde la clandestinidad, el "Señor K" asegura que "la droga la puso la Policía argentina"
A Andrey Kovalchuk lo buscan por los 389 kilos de cocaína hallados en la embajada de su país en Buenos Aires.
Mientras en Europa lo buscan por las "narcovalijas" halladas en la embajada rusa en Argentina, el "Señor K" -cuyo nombre es Andrey Kovalchuk (50)- habló desde la clandestinidad: dijo que él solo tenía ocho valijas con café y no doce de cocaína. Y a través de su abogado, agregó que "la droga la puso ahí la Policía argentina".
"Compré en total 270 kilos de café, que por supuesto luego intenté vender. Por recomendación de mi gran amigo Nikolai Shelepov, un oficial de seguridad de la embajada rusa en Argentina, fui a Uruguay y compré algunas figuras de una materia prima local. (...) Son costosas, pero en Buenos Aires estaban tres o veces más caras. Pensé que podría hacer buen dinero con ellas", relató Kovalchuk en una breve entrevista telefónica con el sitio ruso Kommersant.
El "Señor K" tiene pedido de captura internacional, acusado de ser el líder de una banda que intentaba transportar 389,24 kilos de cocaína de "alta pureza" desde Buenos Aires a Rusia por vía diplomática. La droga fue hallada el 13 de diciembre de 2016, luego de una denuncia del embajador Viktor Koronelli a la ministra Patricia Bullrich, y su ruta seguida en secreto por los investigadores argentinos hasta su llegada a Moscú.
La estrategia de Kovalchuk parece ser la de embarrar la cancha. Ayer su abogado, Vladimir Zherebenkov, dijo que "K" trabajó como asesor técnico para la embajada rusa en Alemania. "Él trabajó como staff técnico en Berlín. E hizo algunos viajes de negocios a Argentina. Obviamente con algo de trabajo", dijo Zherebenkov al canal ruso TV Rain. El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso lo negó.
Para los investigadores argentinos, Kovalchuk es un empresario ruso que vive en Alemania y se dedica al comercio de alcohol y habanos y tenía contactos muy aceitados en la diplomacia. Pero no creen que las once veces que estuvo en Buenos Aires desde 2016 hayan sido en calidad de asesor técnico. En las escuchas que forman parte de la causa, "K" hace referencia a "Kostia" o Kostantine, que sería Kostantine Loskutnikov, dueño de Bossner, una marca de cognac, habanos y productos premium.
Del diálogo que "K" mantiene con el policía de la Ciudad Iván Blizniouk y con el ruso Alexander Chikalo (ambos detenidos en Argentina), se refiere a él como su jefe. No obstante, Loskutnikov rechazó ante los medios rusos que Kovalchuk haya trabajado para él. Es más: dijo que "K" tomó muestras de su marca para mandarlas al país. Según fuentes del caso consultadas por Clarín, Loskutnikov no tendría relación con las narcovalijas. Tampoco está siendo investigado por la Justicia rusa.
Kovalchuk, que tiene orden de captura desde el 18 de enero en Rusia, dice que puede probar que él compró café y no cocaína. Aseguró que tiene los tickets. Y que las cámaras del hotel de Maipú al 900 donde se alojó lo registraron cuando salía con ocho valijas rumbo a la embajada.
Y aportó un dato que hasta ahora era una incógnita: afirmó que las valijas las llevó Shelepov (el oficial de seguridad ruso) en su auto el 21 o 22 de julio. "Su contrato terminaba en febrero. Yo regresé tranquilo pensando en que no iba a haber problemas con el despacho. Pero se peleó con el embajador y de repente, en agosto, dejó de trabajar en la embajada. Y eso hizo que se estancara el envío", aseguró.
En cuanto a Ali Abyanov, el ex tesorero de la embajada que está preso en Rusia por las "narcovalijas", dijo: "Nos presentó Viktor Koronelli (el embajador)". Y agregó: "Nos hicimos amigos cuando las maletas estuvieron en la embajada.
Pero Ali trabajó hasta abril de 2016 y su lugar fue ocupado por Igor Rogov, con quien acordé hacer envíos. Luego lo reemplazó Oleg Vorobyov, nos hicimos amigos pero con el cargamento no pasaba nada. Hasta que en 2017 lo pude enviar a Moscú", relató. Lo que llegó a Rusia el 12 de diciembre de 2017 fueron 380 kilos de harina, que la Gendarmería puso en lugar de la cocaína.