Demasiados toqueteos y por nada
Es lo que denuncian ciudadanos estadounidenses.
En el primer caso verás a Angel Dobbs y su sobrina Ashley de 38 y 24 años de edad respectivamente, quienes fueron detenidas por personal policial en Dallas. Son sometidas a un interrogatorio y cacheo por presunta posesión de marihuana. La sospecha se radicó por una colilla de cigarrillo que fue arrojada por la ventana del auto de las mujeres y, según el oficial David Farell: "olía a marihuana". A partir de ahí llevan a cabo el procedimiento y someten a ambas a un cacheo íntimo por parte de una policía femenina sin que encontraran nada que justificara semejante operativo.
Esta forma de proceder derivó en una acción judicial que terminó en el despido de la mujer policía por abuso sexual y suspensión provisoria del oficial por haberse quedado con un frasco de analgésicos que tenía Ashley en su cartera. Finalmente, la justicia determinó una compensación de US$ 184.000 para las víctimas denunciantes.
En el segundo video ocurrió algo similar con Brandy Hamilton y Alexandria Randle. Ambas venían con su coche de la playa y, vestidas con bikini y shorts respectivamente, fueron detenidas por exceso de velocidad en el condado de Brazoria. Luego del clásico interrogatorio fueron obligadas a bajar del auto y se las sometió a cacheos en sus partes íntimas presuntamente en búsqueda de drogas, que nunca encontraron.
En fin, hechos similares fueron registrados en diferentes puntos del país y abogados y defensores de los derechos civiles coinciden en que estos atropellos son muy comunes.