¿Debe Cristóbal López pagar de su propio bolsillo la deuda millonaria de Oil con la AFIP?
La AFIP rechazó darle una moratoria y una quita de la deuda, que supera los $ 17.000 millones.
La AFIP reclamó al juez comercial Javier Cosentino que Cristóbal López y su socio Fabián de Sousa paguen con su propia plata la deuda de Oil Combustibles, la principal empresa del Grupo Indalo, que supera los $ 17.000 millones, al tiempo que cuestionó la decisión de dicho juez de perdirle a la AFIP que proponga un plan de pagos y una moratoria para esa deuda de la petrolera, "tal como hacía (Ricardo) Echegaray, que siempre le daba planes de pago y Cristóbal nunca pagaba". Vos, ¿qué opinás?
Sucede además que el organismo recaudador del Estado le pidió a los interventores judiciales que "tomen todas las acciones posibles para recuperar" los cientos de millones de pesos que Oil Combustibles le transfirió durante este año a las otras empresas del Grupo Indalo. Y que constituyan una cuenta especial, no embargable, para proteger los salarios de los trabajadores.
Todo comenzó cuando Cosentino citó para el próximo lunes a la AFIP y a los interventores judiciales, para reclamarle al organismo recaudador que defina si va a pedir la quiebra o va a aceptar una quita y un plan de pagos por la deuda de Oil Combustibles, que supera los $ 17.000 millones.
Sin embargo, el organismo le respondió a través de una carta pidiendo que "se cite a una asamblea extraordinaria de accionistas, a celebrarse en sede judicial y en presencia de los interventores, de la Sindicatura y del Comité de Control, para que se evacuen las precisiones arriba requeridas, con el objetivo de que todas las partes involucradas, así como VS (vuestra señoría), posean los elementos de juicio necesarios para disponer el modo más eficaz para la continuidad de la empresa y la cancelación de las deudas, tanto concursales como post concursales".
El informe realizado por los interventores Carlos Bianchi, Liuba Lencova Besheva y Francisco Cárrega sostuvo que además de la deuda que está en concurso de acreedores, al 1 de marzo habían otros $ 2.000 millones de deuda posconcursal, de los cuales $ 1.500 millones correspondían a deuda con la AFIP. Es imposible pagar esa cantidad de dinero "con los números que exhibe actualmente la empresa", dijeron los interventores judiciales en su informe.
Para los interventores judiciales, "es imperativo, entonces, que la AFIP se pronuncie concretamente sobre la existencia de posibilidades excepcionales de reestructuración -mediante quitas, esperas u otros mecanismos- de esa deuda posconcursal, de acuerdo a la normativa aplicable vigente y a los criterios del organismos, o en su caso, manifieste la improcedencia".
La AFIP le respondió que Cristóbal López y Fabián de Sousa paguen la deuda con su propia plata. "Se hace saber que López y De Sousa son propietarios de diversos bienes y de créditos por la venta de su participación accionaria en otras sociedades, activos que fueron informados oportunamente al juez Ercolini, así como otros bienes radicados en el exterior, que no fueran aun informados", planteó el organismo en el escrito.
¿Es justo que el empresario pague de su bolsillo la cuantiosa deuda?
Sucede además que el organismo recaudador del Estado le pidió a los interventores judiciales que "tomen todas las acciones posibles para recuperar" los cientos de millones de pesos que Oil Combustibles le transfirió durante este año a las otras empresas del Grupo Indalo. Y que constituyan una cuenta especial, no embargable, para proteger los salarios de los trabajadores.
Todo comenzó cuando Cosentino citó para el próximo lunes a la AFIP y a los interventores judiciales, para reclamarle al organismo recaudador que defina si va a pedir la quiebra o va a aceptar una quita y un plan de pagos por la deuda de Oil Combustibles, que supera los $ 17.000 millones.
Sin embargo, el organismo le respondió a través de una carta pidiendo que "se cite a una asamblea extraordinaria de accionistas, a celebrarse en sede judicial y en presencia de los interventores, de la Sindicatura y del Comité de Control, para que se evacuen las precisiones arriba requeridas, con el objetivo de que todas las partes involucradas, así como VS (vuestra señoría), posean los elementos de juicio necesarios para disponer el modo más eficaz para la continuidad de la empresa y la cancelación de las deudas, tanto concursales como post concursales".
El informe realizado por los interventores Carlos Bianchi, Liuba Lencova Besheva y Francisco Cárrega sostuvo que además de la deuda que está en concurso de acreedores, al 1 de marzo habían otros $ 2.000 millones de deuda posconcursal, de los cuales $ 1.500 millones correspondían a deuda con la AFIP. Es imposible pagar esa cantidad de dinero "con los números que exhibe actualmente la empresa", dijeron los interventores judiciales en su informe.
Para los interventores judiciales, "es imperativo, entonces, que la AFIP se pronuncie concretamente sobre la existencia de posibilidades excepcionales de reestructuración -mediante quitas, esperas u otros mecanismos- de esa deuda posconcursal, de acuerdo a la normativa aplicable vigente y a los criterios del organismos, o en su caso, manifieste la improcedencia".
La AFIP le respondió que Cristóbal López y Fabián de Sousa paguen la deuda con su propia plata. "Se hace saber que López y De Sousa son propietarios de diversos bienes y de créditos por la venta de su participación accionaria en otras sociedades, activos que fueron informados oportunamente al juez Ercolini, así como otros bienes radicados en el exterior, que no fueran aun informados", planteó el organismo en el escrito.
¿Es justo que el empresario pague de su bolsillo la cuantiosa deuda?