De la selección alemana a morir en Siria combatiendo con los rebeldes
La historia de vida del futbolista parece de película, Burak Karan, quien fue compañero de de Khedira y Boateng tuvo un destino impensado.
El futbolista Burak Karan, jugó en la selección alemana sub 17 y a pesar de ser una promesa del deporte germano su vida cambió en pocos años, se convirtió al Islam y murió en Siria.
El 11 de octubre pasado Karan falleció en un ataque a un poblado sirio. Esta noticia conmovió a los alemanes que lo vieron jugar en varias oportunidades y se imaginaron un futuro más parecido al de los compañeros del jugador, Sami Khedira y Kevin-Prince Boateng. Ellos ahora son deportistas de talla internacional.
¿Qué torció el destino del joven Burak Karan? Él se convirtió al Islam y en 2008 viajó a Siria para combatir contra el régimen del presidente Bachar al-Assad.
"Podría haber vivido muy bien del fútbol", advirtió Thomas Hengen, su último entrenador.
El hermano del deportista contó que Burak enviaba medicamentos a su familia, pero cuando no supo si la mercadería llegaba, viajó con su familia: "como algunos paquetes no llegaban, decidió partir con su mujer e hijo hacia la frontera turco-siria para organizar la distribución", aunque "no quería luchar", publicó el diario alemán Bild.