Policiales
De la militancia a la cárcel
El aberrante abuso en manada que ocurrió en Palermo es mucho más que un hecho violento.
Esta semana conocimos un hecho aberrante, un abuso sexual que un grupo de impresentables llevo adelante en plena vía pública en el barrio de Palermo. Afortunadamente, se frustró por la decidida acción de una vecina y su marido que rescataron a la víctima de las manos de los delincuentes. ¿La Policía? Ausente sin aviso.
El episodio incluyó abuso de alcohol y el uso de drogas. Ahora, los abogados quieren plantearlo como un hecho "confuso".
Claramente, los testigos que salvaron a la chica del ataque y que no tuvieron ningún otro interés más que ayudar y contar lo que vieron (o sea el ataque y el aprovechamiento) aseguran que la joven estaba en muy malas condiciones. Que no se sostenía en pie y balbuceaba.
El hecho es en principio así: un grupo de vagos consumidores habituales de alcohol y marihuana que estaban en la calle cantando vieron la oportunidad de tener sexo grupal con una joven que se hallaba seriamente afectada por el consumo de alcohol. Quienes la vieron indican que tenía serias dificultades para desplazarse y que casi no se comunicaba.
Alguien advierte la situación y oye de uno de los atacantes “está entregada”. Acto seguido, la hacen ingresar a un auto estacionado. Mientras uno la penetraba, el otro tomándola del cabello la obliga a practicarle sexo oral.
Esta situación es advertida por una vecina y su marido, que tienen su panadería justo donde estaba estacionado el auto e intervienen rescatando a la joven, quien toma de la mano a la mujer, buscando protección y abrigo, y agradece que la haya rescatado.
Luego empieza la tarea de “algunos” tratando de explicarnos lo inexplicable. Por orden de jerarquía, la ministra de Género, dijo que son personas comunes y corrientes, y que responden “a una matriz cultural”. Sin dudas la funcionaria tiene un severo desorden mental y desconocimiento de los delincuentes sexuales, pese a que dice "Especialista en Derecho Penal". El sexópata actúa sobre seguro. Esto es cuando la víctima no puede defenderse y es parte de una conducta habitual y permanente. No son acciones aisladas, son patrones de comportamiento. El resto es verso.
Cualquier persona sabe diferenciar lo que está bien y lo que está mal. ¿A ver qué haría cualquiera si ven que su madre, hija, esposa o hermana es atacada por un grupo que quiere abusarla? Cuanto menos lincharía a los delincuentes.
Cuando empezamos a escuchar abogados y familiares nos cuentan que son buenos muchachos, estudiosos, sensibles, solidarios, comprometidos y montón más de cualidades, que de seguro jamás tendrán Que se equivocaron o hubo una confusión.
Dos de los malvivientes se encuentran alineados en la agrupación “La Cámpora” y concretamente militan para un allegado al Cuervo Larroque, que de seguro jamás apañaría a sujetos de esta calaña. Ahora irán a la cárcel. La militancia de poco les sirvió.
Los seis detenidos e imputados se negaron a declarar y próximamente serán trasladados al penal de Marcos Paz o a Ezeiza.
Los abogados ya adelantaron que pedirán su liberación, que de seguro será rechazada de plano. Los operadores y opinadores de siempre ensayan fórmulas para posicionarse mediáticamente y tratar de ingresar a defender a los buenos muchachos, que están acusados del delito de abuso sexual agravado, y que pueden recibir penas de hasta 20 años de prisión.
Dos reflexiones: primero, el alcohol, las drogas y la falta de límites familiares están destruyendo a los jóvenes y segundo, la calle es tierra de nadie. En pleno Palermo hay gente que tiene sexo en la calles.
Hagamos algo antes que sea demasiado tarde…
Dejá tu comentario