Cuidar el agua frente al calentamiento global
Profesionales e investigadores reunidos recientemente en la provincia, insisten en que deben adoptarse medidas tendientes a establecer el debido cuidado del agua, como consecuencia de los cambios que se producirán con el calentamiento global.
No se trata de un tema nuevo, sino que se viene insistiendo sobre el problema en la última década: el calentamiento global es tema de discusión permanente en la comunidad científica y persiste la inquietud sobre lo que sucederá en un futuro no muy lejano.
Mendoza no estará ajena a la situación y en ese sentido deben considerarse las palabras de un investigador canadiense, quien anticipó un escenario negativo en el largo plazo, por lo que reclamó medidas adecuadas para evitar males mayores. Según el profesional, las temperaturas máximas y mínimas continúan subiendo en forma constante año tras año pero destacó que las consecuencias no han sido las mismas para todos los lugares.
En el caso específico de Mendoza, dijo que la escasez de agua se profundizará en aquellos lugares donde actualmente hay carencia y pronosticó menos nieve en la cordillera y la baja de caudales de los ríos. Expresó que es posible disminuir los efectos y señaló que una solución pasa por que haya un manejo más eficiente del agua en términos de riego.
El tema de la optimización del recurso hídrico es uno de los temas estratégicos a resolver en la provincia ya que el riego a través del uso tradicional -a manto- deriva en pérdida de eficiencia de hasta el 40 por ciento, mientras debería considerarse también lo que sucede en el trayecto comprendido entre la fuente inicial de agua, la cordillera, y la finca, con la pérdida de caudales como consecuencia de la falta de impermeabilización de canales.
Los expertos del INTA sostienen en este aspecto que una de las soluciones más eficientes es el riego presurizado y destacan que lo más efectivo es el sistema por goteo, lo que permite también una serie de beneficios, como la programación del riego, la ferti-irrigación -derivando los abonos y agroquímicos a través del agua- y la posibilidad de aprovechamiento de terrenos marginales o de zonas con distintos niveles sin necesidad de grandes trabajos.
También destacan que el sistema por goteo permite ampliar, casi en un 60 por ciento, la superficie irrigada y aseguraron que se puede utilizar no sólo en viñedos y frutales, sino que puede alcanzar a los cultivos anuales, como la horticultura.
El cuidado del agua y el calentamiento global es un tema de alcance mundial y hay países que han iniciado campañas destinadas a reducir el consumo, tanto en las zonas rurales como en las de alta densidad de población.
En las grandes ciudades, el costo del agua es importante, lo que ha contribuido también a generar una cultura de restricción del consumo, mientras paralelamente se han modernizado los sistemas de regadío que van desde el goteo hasta uno utilizado en el sur de Francia, en que el agua baja desde la montaña por cañerías e ingresa a las fincas a través de exclusas que, además de permitir el paso, miden el agua utilizada, obligando entonces a mejorar la utilización dentro de las fincas.
Respecto del calentamiento global, ya hay productores europeos que están reconvirtiendo las plantaciones hacia las nuevas variedades que mejor se mejor se adaptan el nuevo clima.
De lo señalado por el profesional canadiense y de las conclusiones a que se arribó en el Simposio Técnico Frutihortícola, surgen advertencias que debemos respetar en un futuro cercano.
En particular, que será necesario cuidar al agua y esa responsabilidad debe recaer tanto en la gente del campo, que la utiliza para el riego como para la ciudad, más aún si tenemos en cuenta que los mendocinos nos encontramos entre las poblaciones de mayor consumo de agua potable por habitante.