¿Cuál fue el caso policial del año que más impactó?
Durante 2014 algunas causas judiciales se hicieron públicas y tuvieron una fuerte repercusión en la sociedad.
Este año hubo varios casos judiciales que tomaron estado público, conmovieron e indignaron a los argentinos. Empresarios desaparecidos y mujeres asesinadas por violencia de género extrema son los casos policiales más impactantes de 2014.
Melina Romero. La joven de 17 años desapareció en la madrugada del pasado 24 de agosto cuando salía de bailar del boliche Chankanab, en San Martín. Fue violada y asesinada. La testigo clave dijo que un grupo de jóvenes umbandas la drogaron, violaron y mataron. Hoy informaron que liberan a varios detenidos por el caso.
Estudiante chilena Nicole Sessarego Bórquez. Fue asesinada a puñaladas en julio de 2014 cuando llegaba a su casa en el barrio de Almagro. El imputado es Lucas Azcona un joven que por odio hacia las mujeres la atacó a puñaladas. El padre del acusado lo reconoció y entregó a la Policía.
Damián Stefanini. El empresario desapareció el domingo 19 de octubre y no se conoce su paradero. Se encontró su auto sin marcas de haber sido forzado. No se conocen hipótesis firmes sobre qué sucedió con él.
Caso Mariano Benedit. El asesor financiero desapareció el martes 16 de diciembre y fue hallado muerto con un tiro en la cabeza al día siguiente en Costanera Sur. Investigan si fue un suicidio u homicidio.
Motochorro de La Boca. Gastón Aguirre intentó asaltar a un turista canadiense a bordo de una moto. El turista lo filmó y el caso se volvió viral en las redes sociales. Caso Noelia Akrap. Una joven de 16 años fue encontrada asesinada en un descampado y cubierta de cartones, la causa de su muerte fue un ataque a pedradas. Imputaron por el crimen a Lucas Luque, un vecino que acosaba a la joven.
Fallo Marcelo Alberto Girat. Rocío Girat de 20 años, denunció a su papá un militar que la violó sistemáticamente y la justicia no lo apresó en un penal. Desde que Rocío tenía 13 el suboficial de la Armada, la violó y torturó hasta que cuatro años más tarde su madre lo descubrió y empezó la lucha por justicia. Marcelo Alberto Girat tuvo una sentencia inaudita: 14 años de prisión con el beneficio de arresto domiciliario hasta que la sentencia quede firme.