¿Cuál es la situación de los líderes de la barra brava de Boca, Rafael Di Zeo y Mauro Martín, en Paraguay?
Los referentes de "La 12" continúan encarcelados en el país vecino, a pesar de que la mayoría de los hinchas fueron liberados.
Si bien la mayoría de los 237 hinchas de Boca demorados en Paraguay fueron liberados, los líderes de "La 12", Rafael Di Zeo y Mauro Martín, siguen en prisión preventiva en Asunción, luego de que causaran una ola de incidentes en la previa del duelo entre el "Xeneize" y Cerro Porteño por los octavos de final de la Copa Libertadores.
Los dos referentes de la barra brava y otros cuatro miembros no podrán salir de su encarcelamiento hasta que paguen los 100.000 pesos de fianza que exige la Justicia paraguaya, que los imputó por "perturbación del área pública".
"Se los imputa por perturbación del área pública. Vimos las imágenes de lo que ocurrió y se ven muchas personas tirando piedras. Había dos cabecillas que les daban órdenes a los demás", comentó el fiscal de la causa en Paraguay, Aldo Cantero, en diálogo con TN.
Según fuentes policiales, los barrabravas ingresaron a un barrio en las cercanías al estadio Defensores del Chaco de Asunción con disparos y lanzamientos de piedras, lo que procovó el desencadenamiento de incidentes. Los damnificados exigen entre 7000 y 8000 dólares como resarcimiento.
Los dos referentes de la barra brava y otros cuatro miembros no podrán salir de su encarcelamiento hasta que paguen los 100.000 pesos de fianza que exige la Justicia paraguaya, que los imputó por "perturbación del área pública".
"Se los imputa por perturbación del área pública. Vimos las imágenes de lo que ocurrió y se ven muchas personas tirando piedras. Había dos cabecillas que les daban órdenes a los demás", comentó el fiscal de la causa en Paraguay, Aldo Cantero, en diálogo con TN.
Según fuentes policiales, los barrabravas ingresaron a un barrio en las cercanías al estadio Defensores del Chaco de Asunción con disparos y lanzamientos de piedras, lo que procovó el desencadenamiento de incidentes. Los damnificados exigen entre 7000 y 8000 dólares como resarcimiento.