Cristina apoyó la militancia de La Cámpora en escuelas y cárceles
La presidente defendió las actividades políticas que realiza la agrupación juvenil kirchnerista. “Lo que les molesta a algunos viejos, son los jóvenes", expresó la jefa de Estado, en un acto realizado en la Casa de Gobierno.
En su reaparición pública tras un reposo de 48 horas, la presidente Cristina Kirchner defendió hoy las actividades políticas en escuelas y cárceles, y denunció que "en los medios" hay "un gataflorismo con los jóvenes".
Según informa el diario La Nación, tras un reciente descenso en las encuestas, Cristina quiere fortalecer su penetración en el electorado joven, con miras a las elecciones legislativas de 2013, y apoya el proyecto de ley del senador Aníbal Fernández para bajar la edad de votación a los 16 años.
El acto de ayer era en homenaje al gaucho Antonio Rivero, que el 26 de agosto de 1833, hace 179 años, se sublevó contra las autoridades inglesas en las islas Malvinas.
"Primero quiero recordarlo a él porque lo anonimaron, no sé si existirá ese vocablo en la historia. ¿Cómo es anonimar?", se preguntó la Presidente, sin saber que la palabra no existe en la lengua española.
Cristina también calificó a Rivero como "incomprable". Luego, la jefa de estado comentó que el coronel de marina José María Pinedo "se rindió el 3 de enero de 1833 pese a que el gaucho Rivero le pedía que no se rindiera, que no entregaran la isla, que ellos iban a pelear".
En su elogio de Rivero, a la Presidente se le escapó una descalificación involuntaria al paisaje malvinense. "Se lo quiso ocultar y tildar de bandolero, que había peleado por monedas, cuando en realidad se quedó en las islas 20 años. Nadie va a pelear por monedas a un lugar inhóspito y horrible que está todo el día atravesado por vientos y demás", dijo Cristina.
Sobre el final de su discurso, llegaron los elogios a La Cámpora. "Hay miles de jóvenes, pese al 0-800 que les quieren poner, que están descubriendo la política todos los días", señaló Cristina Kirchner, en una crítica al gobierno porteño, que lanzó una línea de teléfono para denunciar actividades políticas en las escuelas.
"Son jóvenes que van a pintar escuelas, que van a las cárceles, que van a los barrios a militar con las armas de la democracia. No importa cuál sea la fuerza política a la que pertenezcan. Me siento muy orgullosa", exclamó Cristina.
"Y hay una gran contradicción, porque los medios por ahí sacan chicos que están bailando y los critican. Cuando van a bailar, porque van a bailar, cuando tomaron cerveza e hicieron algún lío es porque tomaron cerveza e hicieron algún lío; cuando militan porque militan. ¿Saben qué les molesta a algunos viejos?: los jóvenes", explicó la jefa de estado.
"No sé qué quieren. Por favor, basta con los jóvenes, déjenlos tranquilos vivir y que hagan su propia experiencia histórica, que la están haciendo en un país muy diferente al que nos tocó vivir a nosotros", finalizó la mandataria.
Según informa el diario La Nación, tras un reciente descenso en las encuestas, Cristina quiere fortalecer su penetración en el electorado joven, con miras a las elecciones legislativas de 2013, y apoya el proyecto de ley del senador Aníbal Fernández para bajar la edad de votación a los 16 años.
El acto de ayer era en homenaje al gaucho Antonio Rivero, que el 26 de agosto de 1833, hace 179 años, se sublevó contra las autoridades inglesas en las islas Malvinas.
"Primero quiero recordarlo a él porque lo anonimaron, no sé si existirá ese vocablo en la historia. ¿Cómo es anonimar?", se preguntó la Presidente, sin saber que la palabra no existe en la lengua española.
Cristina también calificó a Rivero como "incomprable". Luego, la jefa de estado comentó que el coronel de marina José María Pinedo "se rindió el 3 de enero de 1833 pese a que el gaucho Rivero le pedía que no se rindiera, que no entregaran la isla, que ellos iban a pelear".
En su elogio de Rivero, a la Presidente se le escapó una descalificación involuntaria al paisaje malvinense. "Se lo quiso ocultar y tildar de bandolero, que había peleado por monedas, cuando en realidad se quedó en las islas 20 años. Nadie va a pelear por monedas a un lugar inhóspito y horrible que está todo el día atravesado por vientos y demás", dijo Cristina.
Sobre el final de su discurso, llegaron los elogios a La Cámpora. "Hay miles de jóvenes, pese al 0-800 que les quieren poner, que están descubriendo la política todos los días", señaló Cristina Kirchner, en una crítica al gobierno porteño, que lanzó una línea de teléfono para denunciar actividades políticas en las escuelas.
"Son jóvenes que van a pintar escuelas, que van a las cárceles, que van a los barrios a militar con las armas de la democracia. No importa cuál sea la fuerza política a la que pertenezcan. Me siento muy orgullosa", exclamó Cristina.
"Y hay una gran contradicción, porque los medios por ahí sacan chicos que están bailando y los critican. Cuando van a bailar, porque van a bailar, cuando tomaron cerveza e hicieron algún lío es porque tomaron cerveza e hicieron algún lío; cuando militan porque militan. ¿Saben qué les molesta a algunos viejos?: los jóvenes", explicó la jefa de estado.
"No sé qué quieren. Por favor, basta con los jóvenes, déjenlos tranquilos vivir y que hagan su propia experiencia histórica, que la están haciendo en un país muy diferente al que nos tocó vivir a nosotros", finalizó la mandataria.