Contramarcha en la causa de las jóvenes mendocinas: desde Ecuador afirman que podrían haber sido víctimas de trata
El fiscal a cargo de la investigación planteó que la hipótesis de los familiares, negada en primera instancia, podría ser válida.
La conmoción de los familiares de María José Coni y Marina Menegazzo, quienes se encuentran en Ecuador desde la aparición de los cuerpos de las chicas, no los llevó a paralizarse, sino todo lo contrario: los allegados de las víctimas montaron toda una investigación paralela a la oficial con el objetivo de descubrir la verdad sobre lo ocurrido con las jóvenes.
Mientras que las versiones oficiales afirman que los responsables de los asesinatos ya se encuentran detenidos y confesaron, las familias de Marina y María José insisten en que las jóvenes fueron víctimas de alguna red de trata de personas, hipótesis que las autoridades ecuatorianas descartaron y negaron desde un principio.
Sin embargo, una semana después de la aparición de los cuerpos de las jóvenes mendocinas, el fiscal general de Ecuador, Galo Chiriboga, terminó reconociendo: "Es posible, aunque no tenemos elementos todavía (que las jóvenes hayan caído en una red de tráfico de personas)".
"Está completamente descartado porque los operativos que se hicieron determinaron puntualmente la presunta participación de estas dos personas", había explicado hace apenas una semana el titular de la Dirección Nacional de Muertes Violentas, Víctor Arauz.
En la misma línea, Chiriboga finalmente autorizó la extracción de muestras de ADN de los cuerpos, luego de que los familiares insistieran en reiteradas oportunidades sobre lo "irreconocible" de los cuerpos de sus chicas.
Al respecto, el fiscal explicó: "(Los cuerpos) Van a ser llevados a la Argentina y allí los peritos realizarán el perfil genético. Van a poder realizar por la vía de la asistencia penal estas dirigencias que la fiscalía de Ecuador les encarga", concluyó.