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Conmovedora revelación: el sueño de Gustavo Yankelevich luego de la muerte de Romina

El empresarió narró un sueño que tuvo a los pocos días del fallecimiento de su hija, en el que vivió una experiencia sobrenatural que le hizo concluir: "Romina está conmigo".

Gustavo Yankelevich reveló una conmovedora experiencia que tuvo cuatro días después de la muerte de su hija Romina Yan, ocurrida el 28 de septiembre de 2010.

El empresario contó que tres meses después del fallecimiento de Romina, fue a renovar el registro de conducir, y se le acercó una empleada que también había perdido a su hija, y se abrazaron. Allí, la mujer le sugirió que preste atención a la música y cayó en la cuenta de que ambos escuchaban temas que le hacían acordar a sus hijas fallecidas.

Pero lo más impactante, y a la vez conmovedor, llegó después: "Esto lo voy a contar públicamente por primera vez, aunque ya lo dije en privado a mis seres queridos. La última vez que estuve físicamente con Romina fue tres días antes de que muera y ese día hablamos cinco horas. Fue inusual, porque siempre me quedaba una hora con ella. Cuando me fui, me acompañó al auto, me dio un abrazo, un beso y me dijo 'tengo algo que contarte'. Le dije 'estuvimos cinco horas hablando, ¿y me lo decís ahora?'. Entonces le pregunté: '¿Es bueno o malo?'. Me contestó 'es bueno, pero no era para contártelo ahora'. No me lo llegó a contar...", contó en diálogo con radio Metro.

Luego comentó que durante un tiempo se atendió con la psicóloga con la que Romina hacía terapia. Y entonces, Yankelevich hizo una revelación estremecedora.

"A los cuatro días de la muerte de Romina tuve un sueño muy nítido, era con colores y de una nitidez brutal, tan brutal que no era de la tierra, era un cuento, con nombres de gente que no conocía y que Ro me presentó en el sueño. Entonces voy a lo de Mary y le digo "voy a empezar por una pelotudez, tuve un sueño... No sé qué fue y le empecé a narrar. Cuando le contaba, abría los ojos y me dijo 'Romina te quería contar eso justamente, te fue a contar al sueño lo que te dijo que te iba a contar en persona'. Los nombres de la gente que me presentó en el sueño, ¡eran los nombres de gente con la que iba a trabajar en la comedia! Mary tenía la historia de Romina ahí y me lo dijo ella", manifestó.


Emocionado, al igual que los entrevistadores, concluyó: "Llegué a mi casa, me tiré en ese sillón en el que tantas veces lloré, y le agradecí a Dios no haberla perdido. Romina está conmigo".