Conmoción en San Telmo por muerte de un joven de 15 años
El adolescente murió luego de agonizar tres días como consecuencia de una dura paliza protagonizada por una patota que lo atacó en el barrio porteño.
Un joven de 15 años murió luego de agonizar tres días como consecuencia de una brutal golpiza protagonizada por una patota que lo atacó en el barrio porteño de San Telmo.
El fallecimiento del adolescente, que en primera instancia fue atendido y dado de alta en el hospital Argerich, se produjo el miércoles pasado, aunque se conoció en las últimas horas, luego de que la familia y amigos enterraron el cuerpo de Cristian Medina y reclamaron justicia.
Según fuentes policiales y testimonios de la familia del joven, apodado "Bachi", el episodio se produjo el domingo a la madrugada, a la salida de una fiesta en un boliche del barrio de San Telmo, llamado "Club 947", en la esquina de Chacabuco y Estados Unidos.
"Ahí le pegaron a Bachi y a otro chico que estaba con él, Matías, que terminó con cortes en la cabeza y lesiones en el cuerpo", narraron los amigos de la víctima según recopiló en su edición de este sábado el matutino porteño Diario Popular.
"Bachi logró irse de ahí, pero estos tipos se subieron a las motos y autos y empezaron a buscar. Le hicieron una emboscada cerca del Parque Lezama. Ahí lo lincharon, eran unos 30, con patadas y piñas, de todo", agregaron.
Incluso, por las heridas que tenía el cuerpo de Medina, se supone que una integrante de la patota le arrojó un bloque de cemento en la cabeza, que le desfiguró el rostro.
Tras la brutal golpiza, Bachi quedó tendido en el piso, hasta que fue socorrido por algunos amigos que lo encontraron y dieron aviso a la familia del joven.
El padre de Cristian Medina llegó al lugar y lo trasladó al Hospital Argerich, donde lo revisaron, curaron las heridas superficiales y le dieron el alta.
"Eso fue un error. Bachi estaba muy golpeado, con heridas internas. Si lo hubieran atendido correctamente, tal vez hubiera tenido chances", afirmó Daniel, vecino de la víctima, en declaraciones con Diario Popular.
A las pocas horas de regresar a su casa, Cristian se descompensó y fue llevado a la Clínica Esperanza, donde no pudieron salvarlo por una afección en los riñones, afectados por las patadas recibidas durante el brutal ataque.
Los efectivos de la comisaría 14ta de la Policía Federal y la Unidad Fiscal Este, ambos a cargo de la investigación, analiza las grabaciones de las cámaras de seguridad de algunas empresas de la zona del ataque para tratar de identificar a los responsables.
Los vecinos denunciaron que se trata de una patota conocida en el barrio y que suele atacar a los jóvenes para "divertirse".
"Este grupo viene actuando hace rato y parece que son intocables, porque ya hay varios episodios similares, aunque esta vez cruzaron el límite y mataron a un nene. En diciembre le pegaron a otro chico tanto que le fracturaron la mandíbula", relataron los vecinos.
Por eso, durante el último adiós al cuerpo de Cristian Medina producido este viernes, los amigos lanzaron su advertencia: "Los queremos presos antes del miércoles próximo, que se cumple una semana de la muerte de Bachi y vamos a organizar una gran marcha. Tenemos sus fotos y vamos a ir a sus casas. Sólo queremos justicia, que estén presos".
El fallecimiento del adolescente, que en primera instancia fue atendido y dado de alta en el hospital Argerich, se produjo el miércoles pasado, aunque se conoció en las últimas horas, luego de que la familia y amigos enterraron el cuerpo de Cristian Medina y reclamaron justicia.
Según fuentes policiales y testimonios de la familia del joven, apodado "Bachi", el episodio se produjo el domingo a la madrugada, a la salida de una fiesta en un boliche del barrio de San Telmo, llamado "Club 947", en la esquina de Chacabuco y Estados Unidos.
"Ahí le pegaron a Bachi y a otro chico que estaba con él, Matías, que terminó con cortes en la cabeza y lesiones en el cuerpo", narraron los amigos de la víctima según recopiló en su edición de este sábado el matutino porteño Diario Popular.
"Bachi logró irse de ahí, pero estos tipos se subieron a las motos y autos y empezaron a buscar. Le hicieron una emboscada cerca del Parque Lezama. Ahí lo lincharon, eran unos 30, con patadas y piñas, de todo", agregaron.
Incluso, por las heridas que tenía el cuerpo de Medina, se supone que una integrante de la patota le arrojó un bloque de cemento en la cabeza, que le desfiguró el rostro.
Tras la brutal golpiza, Bachi quedó tendido en el piso, hasta que fue socorrido por algunos amigos que lo encontraron y dieron aviso a la familia del joven.
El padre de Cristian Medina llegó al lugar y lo trasladó al Hospital Argerich, donde lo revisaron, curaron las heridas superficiales y le dieron el alta.
"Eso fue un error. Bachi estaba muy golpeado, con heridas internas. Si lo hubieran atendido correctamente, tal vez hubiera tenido chances", afirmó Daniel, vecino de la víctima, en declaraciones con Diario Popular.
A las pocas horas de regresar a su casa, Cristian se descompensó y fue llevado a la Clínica Esperanza, donde no pudieron salvarlo por una afección en los riñones, afectados por las patadas recibidas durante el brutal ataque.
Los efectivos de la comisaría 14ta de la Policía Federal y la Unidad Fiscal Este, ambos a cargo de la investigación, analiza las grabaciones de las cámaras de seguridad de algunas empresas de la zona del ataque para tratar de identificar a los responsables.
Los vecinos denunciaron que se trata de una patota conocida en el barrio y que suele atacar a los jóvenes para "divertirse".
"Este grupo viene actuando hace rato y parece que son intocables, porque ya hay varios episodios similares, aunque esta vez cruzaron el límite y mataron a un nene. En diciembre le pegaron a otro chico tanto que le fracturaron la mandíbula", relataron los vecinos.
Por eso, durante el último adiós al cuerpo de Cristian Medina producido este viernes, los amigos lanzaron su advertencia: "Los queremos presos antes del miércoles próximo, que se cumple una semana de la muerte de Bachi y vamos a organizar una gran marcha. Tenemos sus fotos y vamos a ir a sus casas. Sólo queremos justicia, que estén presos".