Con el candidato del peronismo
*Por Rafael Bielsa. Terminadas las internas partidarias, el peronismo santafesino tiene desde el 23 de mayo de 2011 un candidato a gobernador incuestionable: Agustín Rossi.
Quienes no prevalecimos estamos obligados frente a quien lo hizo, frente a nuestros votantes y frente a los valores constitutivos del sistema a aportar todo lo que esté a nuestro alcance -bajo las directivas del candidato del sector- para que gobierne Santa Fe a partir del 10 de diciembre próximo.
En ocasiones, la complejidad derivada de los mecanismos de acumulación y construcción de poder parecieran quitar flexibilidad a los pasos que es necesario dar para constituir una fuerza sólida y competitiva. Sin embargo, alguna idea puede colaborar para que la energía no se disipe prestándole atención a una maquinaria sino definiendo un propósito, que no puede ser otro que ganar con argumentos persuasivos las próximas elecciones generales. Con ese espíritu están escritas estas líneas.
Durante las internas, afortunadamente, no faltaron los debates. Los relativos a nuestro espacio pusieron de manifiesto algunas coincidencias marcadas entre los protagonistas. Quizás la más importante y distintiva fue el énfasis que el peronismo puso en que Santa Fe expanda su desempeño productivo. Junto con esta coincidencia, no hubo mayores diferencias en cuanto a que el sistema educativo debe estar orientado a la producción de conocimientos que sean coincidentes con nuestra matriz agroindustrial y a que la obra pública tiene que pensarse de manera articulada con el desarrollo de la provincia mirado armónicamente y con la necesidad de aumentar la creación de puestos de trabajo registrados.
Todos los que nos interesamos por la política internacional sabemos que los acuerdos perdurables se vinculan con la detección y actuación de coincidencias substantivas. Los estadistas del Congreso de Viena, que en 1814/15 lograron arreglos con vigencia por muchos años, estaban de acuerdo en cosas fundamentales y miraban con los mismos ojos cuestiones de forma y de fondo. Los políticos norteamericanos, que inventaron el mundo posterior a la Segunda Guerra Mundial, se nutrían de una tradición de pensamiento con una importante coherencia interna. Desde estas enseñanzas pueden pensarse algunas modalidades que le permitan al peronismo santafesino cursar con éxito el camino que tiene por delante, aunque los medios parezcan obligarnos a aceptar metas menos ambiciosas que nuestros anhelos y las circunstancias a planificar dichas metas por etapas.
En el curso de los debates que tuvieron lugar a lo largo de los meses que culminaron el 23 de mayo, los precandidatos del peronismo nos explayamos acerca de que la provincia debe apuntar a fortalecerse en lo que es competitiva y puede serlo aún mucho más.
El Estado provincial debe privilegiar a las empresas que trabajen en la automatización electrónica de las tareas agrícologanaderas, en la obtención de proteínas de la sangre bovina, en el desarrollo de energías alternativas, en la reproducción inteligente de bacterias que ayuden a fijar nitrógeno en los cultivos, en la generación de eventos transgénicos en las forrajeras y en la adaptación de las semillas para obtener altos rendimientos con bajos insumos. Agustín Rossi enlazó esta impronta con el ordenamiento territorial y acuñó la frase siguiente: "Una empresa, una localidad".
La obra pública, a su turno, debe seguir ese compás. Con 849 kilómetros de frente fluvial sobre el río Paraná, por ejemplo, la actividad portuaria ofrece las mejores condiciones de competitividad, por lo que se impone la puesta en valor de las vías navegables globalmente consideradas, una de las ventajas comparativas por excelencia de la región.
Nada de todo lo expuesto es alcanzable sin el acompañamiento de los recursos humanos indispensables. Para generar conocimiento y desarrollar tecnología es necesario capacitar al excelente personal docente con el que cuenta la provincia para que las netbooks --por poner un caso- no sean utilizadas para estudiar en formato digital lo mismo que podría estudiarse en formato analógico, sino para detectar en los niños aptitudes hacia determinados saberes, como el cálculo numérico, y transformar esas condiciones naturales en vocación. Santa Fe necesita y necesitará ingenieros en pesca, en materiales, agrónomos, en sistemas, en comunicaciones, industriales, en sistemas biológicos, para crecer no sólo de manera sostenida sino de modo sustentable, esto es, más allá de los ciclos.
Ninguno de los precandidatos del peronismo dejaría de coincidir con estos lineamientos, según resultó de las campañas propias de la interna. Dicho lo que antecede, es posible pensar en una determinada modalidad de trabajo que permita poner en armonía las aptitudes necesarias para llegar al sillón del brigadier con las indispensables para gobernar, que no son las mismas.
Las listas legislativas del peronismo disponen de recursos humanos notables. Desde María Eugenia Bielsa a Germán Kahlow, de Oscar Daniele a Roberto Mirabella, de Avelino Lago a Alejandro Fraga, de Mario Lacava a Leandro Busatto, de Silvina Frana a Danilo Capitani, por mencionar sólo a algunos pocos, sin que las ausencias supongan demérito sino mérito a la brevedad.
Harían falta sólo unas pocas medidas de organización y método para que toda la lista comience a trabajar en red, junto con quienes fuimos candidatos, para homogeneizar las ideas, conformar una agenda legislativa e ir preparando desde ahora los textos más importantes que serán presentados a consideración de la Legislatura provincial a partir del 10 de diciembre.
Poner en práctica esta iniciativa arrojaría algunas ventajas: a) mantendría fresco el discurso del candidato a la Gobernación; b) pondría en contacto y activos a referentes territoriales de la lista ganadora que no se impusieron en sus lugares de desempeño y a los de las listas que no prevalecieron pero que sí triunfaron, generando una sinergia más allá de la coyuntura electoral; c) crearía un espacio de debate y enriquecimiento recíproco; d) facilitaría la interacción entre el candidato a gobernador y quienes fuimos precandidatos al ordenar virtualmente agendas que por fuerza son distintas, sin que queden dudas acerca del apoyo explícito a la expectativa que ganó legítimamente.
Estos son momentos en los que deben prevalecer la generosidad, la vocación de gobierno, la oportunidad de las ideas y el vigor de la unidad. Por ello, más que nunca antes si cupiera, manifiesto mi compromiso con la candidatura a gobernador de Agustín Rossi, sin dudas y con alguna iniciativa como la expuesta. La que me permiten mis obligaciones y a la que me obliga mi conciencia.