¿Cómo es el "proceso de indignación" que vive Yanina Latorre luego del "puntita-gate"?
La panelista brindó detalles de la nueva relación con su marido. "Se me desmoronaron 23 años de pareja, fue feo", lamentó.
Sin pelos en la lengua, Yanina Latorre contó qué siente. Es que, a dos meses de desatarse el escándalo con su marido, Diego Latorre, y la mediática Natacha Jaitt, Yanina asegura que experimenta distintas emociones. Casi siempre encontradas.
"Es como en los segundos después a un accidente de tránsito, cuando no entendés qué pasó, adónde estás, cómo llegaste ahí... Así estoy", expresó la panelista, y continuó: "Al principio me pegó de una forma, ahora de otra. Pero estoy triste (...) Hace un rato Marcelo (Polino) y Amalia (Granata, con quienes tiene un programa de radio en Mitre) me preguntaban cómo estaba, y les dije que estoy en un proceso de indignación. Me pregunto si acepté todo demasiado rápido...".
También reconoció que los suyos son días complicados. "Es difícil lo que estoy viviendo: se me desmoronaron 23 años de pareja, fue feo. Y hay un montón de planteos", admitió, y agregó: "Todo lo que acepté fue por amor, aunque hay momentos donde me pregunto si hice bien. Estoy enojada, pero por ahí en una semana se me pasa. Y en mi pareja por ahora todo está igual: eso nunca cambió".
En diálogo con Infobae, lamentó los agravios que recibe en muchos comentarios a través de las redes sociales. "Subo una foto a Instagram y me ponen: 'Hola vieja', 'Hola cornuda'. ¡Es muy cruel! De la nada... ¡Explicame esos insultos! No lo entiendo. ¡Y me los dicen las mujeres! Es algo complejo. La gente está loca... ¡pero loca de verdad", se quejó.
Sin embargo, confesó que lo que más le duele son los insultos hacia sus hijos: "Amalia me contaba que le pasa lo mismo. Después del programa de Susana (Giménez), ¡sube una foto e insultan a su bebé!". Sin embargo, aseguró no dejará de usar las redes. "También hay gente muy buena onda, hay mujeres que son divinas -destaca-. Yo fui la cornuda, no le metí los cuernos a nadie. Y voy a seguir hablando. La gente me dice: '¿No escarmentás?'. ¡¿Qué es escarmentar?! Eso es para un chorro o un asesino, no para un periodista. Porque yo no le deseo el mal a nadie, sólo doy información", cerró.
"Es como en los segundos después a un accidente de tránsito, cuando no entendés qué pasó, adónde estás, cómo llegaste ahí... Así estoy", expresó la panelista, y continuó: "Al principio me pegó de una forma, ahora de otra. Pero estoy triste (...) Hace un rato Marcelo (Polino) y Amalia (Granata, con quienes tiene un programa de radio en Mitre) me preguntaban cómo estaba, y les dije que estoy en un proceso de indignación. Me pregunto si acepté todo demasiado rápido...".
También reconoció que los suyos son días complicados. "Es difícil lo que estoy viviendo: se me desmoronaron 23 años de pareja, fue feo. Y hay un montón de planteos", admitió, y agregó: "Todo lo que acepté fue por amor, aunque hay momentos donde me pregunto si hice bien. Estoy enojada, pero por ahí en una semana se me pasa. Y en mi pareja por ahora todo está igual: eso nunca cambió".
En diálogo con Infobae, lamentó los agravios que recibe en muchos comentarios a través de las redes sociales. "Subo una foto a Instagram y me ponen: 'Hola vieja', 'Hola cornuda'. ¡Es muy cruel! De la nada... ¡Explicame esos insultos! No lo entiendo. ¡Y me los dicen las mujeres! Es algo complejo. La gente está loca... ¡pero loca de verdad", se quejó.
Sin embargo, confesó que lo que más le duele son los insultos hacia sus hijos: "Amalia me contaba que le pasa lo mismo. Después del programa de Susana (Giménez), ¡sube una foto e insultan a su bebé!". Sin embargo, aseguró no dejará de usar las redes. "También hay gente muy buena onda, hay mujeres que son divinas -destaca-. Yo fui la cornuda, no le metí los cuernos a nadie. Y voy a seguir hablando. La gente me dice: '¿No escarmentás?'. ¡¿Qué es escarmentar?! Eso es para un chorro o un asesino, no para un periodista. Porque yo no le deseo el mal a nadie, sólo doy información", cerró.