Comienzan los alegatos en el juicio por el crimen del artesano
Las declaraciones de la defensa de los dos hombres acusados del asesinato del artesano patagónico Daniel Bonnassiolle en 2009, se llevarán a cabo desde esta mañana en los tribunales de Lomas de Zamora.
El debate se desarrolla en el edificio situado en Larroque y Camino Negro, de Banfield, en el sur del conurbano, donde Sebastián Avalos Lencina (29) y Luciano Kausines (33) son juzgados por el delito de "homicidio en ocasión de robo".
Los alegatos ante Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 6 de Lomas de Zamora se realizarán desde las 10.30, cuando exponga sus argumentos el fiscal Hugo Carrión, seguido por las defensoras oficiales Marcela Piñero y María Fernanda Mestrín.
Los últimos testigos que declararon ante los jueces Claudio Fernández, Gabriel Vandemberg y María Laura Altamiranda fueron un sargento de la Policía Científica y un técnico de la empresa Nextel, quien explicó el entrecruzamiento de llamados.
Además, declaró el médico forense que realizó la autopsia del cuerpo y explicó la trayectoria del proyectil que impactó en el hombre, mientras que también testificaron otras tres personas presentadas por la defensa de Avalos Lencina.
Durante el juicio, Jorge Arias, amigo de Bonnassiolle, declaró que él estaba junto a la víctima
cuando los asaltaron tres delincuentes y mataron a su amigo.
Este testigo reconoció al imputado Avalos Lencina como el autor de los disparos que provocaron la muerte del artesano patagónico, pero no a Kausines.
El hecho ventilado en el juicio ocurrió el 13 de mayo de 2009, frente a una vivienda ubicada en las calles Sáenz Peña y Pavón, en la localidad de Remedios de Escalda, de Lanús, en el sur del conurbano, donde viven los padres de Bonnassiolle.
La víctima, de 37 años, residía en la ciudad santacruceña de El Calafate donde era dueña de un comercio de artesanías, y ese día había ido a visitar a su familia.
La noche del crimen, Bonnassiolle llegó a lo de sus padres junto a su amigo Arias a bordo de una camioneta Nissan, patente HDP 866, que estacionaron frente a la casa ya que no había lugar para guardar el vehículo en el garaje.
En ese momento, tres delincuentes arribaron al lugar en un Fiat Uno, y uno de ellos descendió del auto armado y amenazó a la víctima y a su amigo con fines de robo.
Ante esa situación, Bonnassiolle pensó que los ladrones querían entrar a la casa de sus padres y gritó algunas palabras, por lo que el delincuente armado le efectuó tres disparos.
La víctima recibió un impacto de bala en el tórax a la altura de la clavícula que le provocó la muerte casi en el acto.
Tras el ataque, los delincuentes escaparon en el auto sin concretar el robo, mientras que los familiares de la víctima alertaron de lo ocurrido a la policía.
Poco después, efectivos policiales detuvieron a Kausines y Avalos Lencina y los trasladaron a la comisaría local.