Cinturita de avispa
Quiere batir un nuevo récord mundial. Cuando veas adónde quiere llegar, no lo vas a creer.
Michele Koebke, de 24 años, quiere marcar un nuevo récord: la cintura más angosta del mundo. Para lograr su objetivo viene usando corsés –el día entero- durante los últimos 3 años, sacándoselos solo cuando se ducha. Por desgracia, esta fascinación inusual con los corsés le está costando la salud.
Michele es una fanática de la moda de las cinturas de avispa del siglo XIX, cuando las mujeres usaban corsés muy ajustados para reducir la cintura y adquirir una apariencia similar a la del cuerpo segmentado de una avispa. Llevó su pasión al extremo usando un corsé, día y noche, desde fines de 2009, con la esperanza de marcar un nuevo récord.
Durante los últimos tres años Michele redujo su cintura de 64 a 54 centímetros, lo cual la alienta a sobrepasar a su adorada Cathie Jung, cuya cintura de 34 centímetros es actualmente reconocida como la más angosta. Aunque admite que apretar gradualmente su cuerpo con corsés cada vez más pequeños es como un deporte extremo, el cual la deja sin aliento o incapaz de consumir un plato de comida normal, la joven nacida en Berlín, Alemania, dice que ama a su pequeña y deformada cintura.