Chile: 12 muertos y diez mil evacuados por un incendio forestal
El fuego quemó 500 casas y afecta 270 hectáreas en las zonas de Valparaíso y Viña del Mar.
El ministro del Interior de Chile, Rodrigo Peñailillo, elevó a anoche a 12 el número de muertos por el incendio enValparaíso, que obligó también a la presidenta Michelle Bachelet a suspender el viaje oficial que tenía previsto realizar a Argentina el próximo día 15.
En una comparecencia ante la prensa en la sede del gobierno regional de Valparaíso, el ministro Peñailillo actualizó las cifras oficiales de la catástrofe, que ha arrasado 850 hectáreas, destruido más de 2.000 viviendas y dejado sin hogar a unas 8.000 personas.
La presidenta Bachelet, que durante este domingo encabezó un comité de emergencia en Valparaíso y recorrió los albergues y zonas afectadas, sostendrá mañana una reunión en el palacio de la Moneda, en Santiago, con varios de sus ministros, para analizar la emergencia en la ciudad portuaria.
La catástrofe en Valparaíso ha alterado la agenda de la mandataria, que este martes tenía previsto viajar a Argentina, en la que iba a ser su primera visita oficial desde que hace un mes retornó a la presidencia de Chile.
Durante la noche de este domingo y la madrugada del lunes, unos 900 policías resguardarán el orden y la seguridad en Valparaíso, que está bajo el control de las Fuerzas Armadas desde que anoche la presidenta Bachelet decretó el estado de excepción a causa de la catástrofe.
El responsable del Interior informó de que han sido habilitados lugares de acopio para recolectar materiales de construcción, ropa y alimentos con los que ayudar a las familias afectadas, que este mismo domingo, con sus casas todavía en ascuas, comenzaron a retirar los escombros.
El ministro Peñailillo detalló que el Gobierno apoyará a los damnificados con un bono equivalente a 370 dólares para que puedan comprar ropa y otros artículos de primera necesidad, y también les entregará herramientas para reconstruir sus casas.
La previsión es que, si se mantienen las condiciones meteorológicas, para mediados de la próxima semana el incendio esté totalmente extinguido, por lo que las brigadas aéreas y terrestres seguirán trabajando en los próximos días.
Pero mientras la veintena de helicópteros e hidroaviones y los 1.500 bomberos y brigadistas forestales luchan denodadamente para dominar los nuevos focos de incendio que se han avivado con el viento y mantener el resto bajo control.
En una comparecencia ante la prensa en la sede del gobierno regional de Valparaíso, el ministro Peñailillo actualizó las cifras oficiales de la catástrofe, que ha arrasado 850 hectáreas, destruido más de 2.000 viviendas y dejado sin hogar a unas 8.000 personas.
La presidenta Bachelet, que durante este domingo encabezó un comité de emergencia en Valparaíso y recorrió los albergues y zonas afectadas, sostendrá mañana una reunión en el palacio de la Moneda, en Santiago, con varios de sus ministros, para analizar la emergencia en la ciudad portuaria.
La catástrofe en Valparaíso ha alterado la agenda de la mandataria, que este martes tenía previsto viajar a Argentina, en la que iba a ser su primera visita oficial desde que hace un mes retornó a la presidencia de Chile.
Durante la noche de este domingo y la madrugada del lunes, unos 900 policías resguardarán el orden y la seguridad en Valparaíso, que está bajo el control de las Fuerzas Armadas desde que anoche la presidenta Bachelet decretó el estado de excepción a causa de la catástrofe.
El responsable del Interior informó de que han sido habilitados lugares de acopio para recolectar materiales de construcción, ropa y alimentos con los que ayudar a las familias afectadas, que este mismo domingo, con sus casas todavía en ascuas, comenzaron a retirar los escombros.
El ministro Peñailillo detalló que el Gobierno apoyará a los damnificados con un bono equivalente a 370 dólares para que puedan comprar ropa y otros artículos de primera necesidad, y también les entregará herramientas para reconstruir sus casas.
La previsión es que, si se mantienen las condiciones meteorológicas, para mediados de la próxima semana el incendio esté totalmente extinguido, por lo que las brigadas aéreas y terrestres seguirán trabajando en los próximos días.
Pero mientras la veintena de helicópteros e hidroaviones y los 1.500 bomberos y brigadistas forestales luchan denodadamente para dominar los nuevos focos de incendio que se han avivado con el viento y mantener el resto bajo control.