Chavistas por un rato
Sabina cantaría "yo no quiero domingos por la tarde", con Barón Rojo tocando los melancólicos acordes de "Los domingos son muy aburridos" para describir esas tardes en que el deporte sin atractivos y el frío no dejan lugar a emociones.
La redacción estaba así en la tarde helada, con sensación parecida a la clásica depre del día en que la gente descansa. Los periodistas trabajaban en silencio sobre las notas previstas, y, excepto la decisión de bajar la nota que primero se diagramó como central -"Las heladas provocarán serios daños en el agro"- por la novedad de que hay crisis en la provisión de combustible en toda la provincia, todo lo demás se hizo siguiendo la formal rutina.
El único momento de exclamaciones fue en el minuto final del partido entre Brasil y Venezuela, cuando los venezolanos generaron temor en el arco de los brasileños. Varios alentaron fuerte a Venezuela y se quedaron con las ganas. Así lo graficó el cronista de Espectáculos: "Ahora son todos chavistas, che".