Chacho Álvarez: "El desafío es que los presidentes superen la pérdida de Chávez"
Alvarez recordó con dolor y afecto la "estrecha relación" que tuvo con Chávez, así como a la que tiene con el flamante presidente encargado de Venezuela, Nicolás Maduro.
Alvarez recordó con dolor y afecto la "estrecha relación" que tuvo con Chávez, así como a la que tiene con el flamante presidente encargado de Venezuela, Nicolás Maduro.
"El gran desafío del proyecto de integración es que los presidentes actuales de los principales países de la región puedan superar esta pérdida de Chávez", señaló.
El titular de la Aladi destacó en Chávez la solidaridad, en particular "con la Argentina, cuando a la Argentina nadie la ayudaba".
"Yo lo veo en Uruguay (donde tiene su sede la Aladi) y esto tiene que ver con las palabras de (el presidente de ese país, José) Mujica de reconocer que (Chávez) era el hombre más solidario que había conocido".
En el mismo sentido, mencionó al programa inspirado por Chávez "Petrocaribe, por el cual Venezuela les vende el petróleo a los países (caribeños) deficitarios en energía a un precio muy subsidiado, a plazos muy largos, con tasa de interés muy baja".
"Entonces, reemplazar a ese hombre, con ese conjunto de atributos que tenía Chávez, no es fácil", insistió.
En opinión de "Chacho" Álvarez, "los presidentes de los países latinoamericanos van a tener que hacer un esfuerzo suplementario para seguir garantizando este proceso (integrador) que es tan definitorio y estratégico para el destino de nuestra región".
"A Chávez lo conocí mucho porque tuve la fortuna de que Venezuela se incorporara al Mercosur cuando yo presidía la Comisión de Representantes" de ese organismo de integración, explicó.
"En ese período, viajé mucho a Caracas, lo frecuenté mucho y por eso me dolió mucho (su fallecimiento) desde el punto de vista personal, porque tenía con él una relación estrecha", añadió.
Alvarez aludió en especial a su "recuerdo muy fuerte de la noche del 6 de octubre, un día antes de la última elección" presidencial en Venezuela, que volvió a ganar Chávez en 2012.
"Yo estaba acá como jefe de observadores de Unasur y tuve una conversación de más de una hora con él, en la que estaba también Nicolás Maduro, y me conmovió cuando me dijo: `Yo tengo encima tres operaciones`, después de comentarme cómo había sido el acto de cierre, lo que había sentido", relató.
En ese momento, dijo "Chacho", a Chávez "se lo notaba un hombre que estaba haciendo un tremendo esfuerzo mental para ganar esa elección, sobreponiéndose" a los padecimientos de la enfermedad.
"En la relación personal, era un hombre encantados, un hombre carismático, muy seductor. De (Juan Domingo) Perón, a quien yo conocí muy poco, se decía que era un hombre de esa naturaleza, un seductor, un conquistador", expresó.
Alvarez sostuvo que "el llanto del pueblo venezolano muestra a las claras lo que significó Chávez para Venezuela. Creo que cualquier dirigente bienintencionado, aun opositor, va a reconocer cuánto aportó, cuán importante fue, por ejemplo, para fortalecer la Unasur, para impulsar la creación de la Celac".
"Sin conocerlo tanto como en el plano externo, creo que en el plano interno fue pasando lo mismo. Y Chávez tuvo un momento de lucidez extraordinaria, que fue designarlo (cono candidato para sucederlo como presidente de Venezuela) en vida, porque eso garantiza la unidad de su movimiento y de su partido" Socialista Unido (PSUV), acotó.
Álvarez subrayó que "esto es algo muy difícil, porque los líderes casi siempre piensan que no se van a morir hasta terminar parte importante de su misión. Entonces, es muy difícil que el líder designe a un sucesor", aunque sepa que tiene una enfermedad que puede ser terminal.
"Y ese gesto que Chávez tuvo el 8 de diciembre (último), pidiendo al pueblo venezolano que apoye y vote a Maduro (como su eventual sucesor) fue un acto de una tremenda inteligencia estratégica", destacó.
En cuanto s su relación con Maduro, dijo que lo conoció "mucho" y opinó que "tuvo un ascenso meritoriamente ganado porque en su rol de canciller consiguió el aprecio, el respeto y el reconocimiento del conjunto de los países, por su capacidad, su buen trato, su flexibilidad".
"Porque así como Venezuela está convencido de lo que piensa, también es flexible cuando tiene que tratar con proyectos que a veces están en las antípodas de lo que piensa el gobierno venezolano", expresó.
En este aspecto, citó por ejemplo la relación de Venezuela "con Colombia, con Chile y también con países caribeños que tienen una vinculación muy estrecha con los Estados Unidos y que, sin embargo, participaron en la cumbre de Caracas (en 2011,, cuando se conformó la Celac), con una gran diversidad, que Chávez manejó con mucha maestría".
"Y Maduro creció al calor de ese protagonismo que tuvo Chávez en la política latinoamericana e internacional, y se fue instalando como un hombre con mucho prestigio", concluyó.