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César Sena se casó con Cecilia sin avisarle a su familia y se divorciaron a los diez días

El principal sospechoso por la desaparición de la joven y la presunta víctima se casaron por civil a escondidas del círculo de él. La madre del joven se enteró por Facebook y le ofreció a la chica dinero para que firmara el divorcio.


Marcela Acuña, esposa del polémico dirigente sindical Emerenciano Sena, se enteró del casamiento de su hijo César (19) con Cecilia Strzyzowski (28) por Facebook. El 16 de septiembre de 2022, cuando el joven pasó con su novia por el registro civil, la familia Sena no lo acompañó porque nadie sabía que iban a casarse. César se casó a escondidas.

El joven, hoy principal imputado en la causa que se investiga como femicidio, sabía que su familia no aprobaba la relación con Cecilia. Desde el círculo de él contaron que los dirigentes sociales veían con malos ojos no sólo la forma en que se conocieron (a través de una aplicación de citas) sino la diferencia de casi diez años edad entre ambos.

Justamente por eso, diez días después de la unión, la pareja firmó el divorcio. El dato fue confirmado a este medio por una alta fuente de la investigación. Días atrás, el ahora ex abogado de César, Juan Díaz, había dicho que el matrimonio duró apenas tres meses y que Marcela Acuña le ofreció a la joven una compensación económica a cambio de la separación.

“Marcela llamó a Cecilia y le ofreció 400 mil pesos para divorciarse. Ella aceptó”, confirmó una persona muy cercana a César quien, a pesar de la desaprobación de sus padres, decidió seguir en pareja y conviviendo. En declaraciones radiales, el hermano de Marcela y tío de César, Ricardo Goya se refirió a la situación y habló de un “divorcio extorsivo”.

La familia de Cecilia tampoco estaba de acuerdo con el casamiento. “Eran muy jóvenes y apenas se conocían”, dijo su hermana Ángela. En sintonía, su mamá Gloria Romero explicó: “Nunca estuve de acuerdo porque sabía que la madre de él (Marcela Acuña) no los apoyaba. ‘Mirá que cuando te casás con alguien te casás con todo su entorno’, le advertí a mi hija. Pero Cecilia quiso casarse igual. ¿Y qué iba a hacer? Le tejí el vestido que usó para su civil”.

Sobre el divorcio, la mujer contó en su declaración testimonial que “una vez” había hablado del tema con su hija y que Cecilia le contó “que César le había hecho firmar varios documentos de los que desconocía su contenido, los cuales fueron preparados por el abogado de Marcela Acuña”.

A pesar de las discordias hay un dato llamativo: quince días después de pasar por el registro civil, según registros previsionales, Cecilia fue dada de alta como empleada del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología provincial (mismo lugar donde estaba Magalí Fernández Leyes, testigo del caso) con pagos de aportes incluídos, entre entre octubre de 2022 y abril de 2023. El mes de mayo no lo cobró.

Desde la Dirección de Unidad de Recursos Humanos del Ministerio de Educación de la Provincia del Chaco confirmaron a este medio que no hay registro de que Cecilia Strzyzowski haya trabajado como personal de planta o becada de esta dependencia. Es que según su familia, la joven trabajaba en el Centro de Salud de barrio de Emerenciano Sena y Marcela Acuña.

Otra vez aparecen las contradicciones: si no la querían en la familia, ¿para que le consiguieron un cargo? ¿Habrá sido un pedido de César al que Emerenciano accedió? Antes de eso, Cecilia, que era técnica en informática, se desempeñaba como empleada de un call center.

Hoy se cumplen dos semanas de la desaparición de la joven y la hipótesis de que hubo un plan para matarla cobra cada vez más peso para los investigadores.

“Hubo un acuerdo para darle muerte a Cecilia que involucra a Emerenciano Sena, Marcela Acuña y su hijo César. Le hicieron el cuento del viaje a Ushuaia y el día que tenía que volar, desapareció. Hubo una premeditación”, dijeron altas fuentes de la investigación a Infobae. 

Esta mañana, las mismas fuentes revelaron un dato hasta ahora desconocido: no había pasajes para volar a ningún lado. “Jamás se compró un boleto de avión. Alguien la engañó a Cecilia”, dijo otra persona con acceso al expediente.

Los mensajes que intercambió con su hermana, Ángela, la madrugada del 2 de junio son prueba de que Cecilia fue engañada. “Nos estamos yendo pal sur (sic) y quería despedirme por si se cae el avión jeje”, le dijo en un mensaje de WhatsApp que envió a las 1.33 am.

Horas más tarde, ya de día, un registro fílmico de cámaras de seguridad identificó a Cecilia haciendo su ingreso a la casa de los Sena, en Santa María de Oro, en Resistencia. Ella ingresa, pero jamás se la ve salir.

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