Centurión apuntó contra Racing y cruzó a Ruggeri: "A la noche no tengo sueño, quiero ir a tomar algo todos los días"
El futbolista de la "Academia", separado del plantel profesional, intercambió palabras con el "Cabezón".
A 48 horas del Racing-Defensa y Justicia que tendrá lugar en el de Avellaneda y verá festejar al plantel campeón con su gente, Ricardo Centurión tomó la palabra y dejó títulos fuertes. Le apuntó a la dirigencia, hizo confesiones sobre su vida privada y tuvo un cruce con Oscar Ruggeri, que mostró su lado paternal.
Pese a que Diego Milito y varios compañeros anunciaron que estaría invitado, el mediocampista que fue separado del grupo profesional tras su empujón a Eduardo Coudet, aseguró que todavía no lo han llamado para acudir a la cita del domingo. "Hace 4 semanas me dejaron entrenando solo y nadie se acercó a ver cómo estaba. Ahora muchos se acuerdan y dicen que tengo que estar para dar otra imagen", expresó en.
Ricky afirmó sentirse dolido por el destrato por parte de la dirigencia y el cuerpo técnico: "Me siento parte de esto porque aporté mucho, pero no termino de estar completo si me mando solo el domingo. Un empujón cambió todo, el salió a decir que tenía que tomar medidas para maneajar un grupo y, en el grupo, pasaron muchas cosas. El único que salió perjudicado soy yo. Dijo que no podía juzgar a la persona, pero a mí me terminó juzgando. Quieras o no, me hizo mal".
Por otra parte, Centurión denunció que desde la dirigencia advirtieron a sus compañeros de la Reserva que no podían juntarse a comer un asado con él porque serían despedidos. Además, que lo hicieron cambiarse con juveniles de 12 años y le impidieron jugar en los partidos oficiales de la Reserva pese a haber hecho el pedido. "Tienen mi número, hay un chico de 26 años entrenando en el predio Tita Mattiussi, que vengan y me digan en la cara 'Ricky, ¿venís el domingo?'", acotó.
Y antes de tener un diálogo imperdible con Ruggeri, señaló a Milito, manager : "Fue uno de los que dijo varias cosas que no me dijo en la cara. Le tenía mucho respeto a él, desde que fue compañero mío, pero muere en el vestuario. Muchas veces tuvimos cortocircuitos y puede ser que se hayan mezclado las cosas en este momento".
El futbolista se hizo cargo de haber estado mal al empujar a su técnico y que "en seis años de carrera me he mandado mis cagadas". En tanto, confirmó que está recibiendo ayuda de un psicólogo, algo que fue celebrado por Ruggeri, quien le dijo: "Vos sabés que el empujón al Chacho fue muy grave. Yo no te hubiera dejado entrar al partido. Es una lástima porque tenés unas condiciones bárbaras, pero hay que ser profesional siempre".
Luego el tomó un rol paternal y lo aconsejó una y otra vez: "Me vuelvo loco porque ahora no te das cuenta y cuando tengas 35 ó 40 años y dejás de jugar, vas a decir 'qué boludo, hice esto y estaba mal'. Vos te tenés que ir a dormir temprano porque los jugadores dependemos del físico".
La respuesta de Centurión dejó callados a todos en el estudio: "Yo te voy a ser honesto, a la noche no tengo sueño. Tengo ganas de salir a tomar algo todos los días. A los 36 años no me voy a arrepentir de nada, vos sos vos. Mi mamá, mi abuela y los que me quieren me dicen lo mismo. Está en uno tomar las decisiones".
Y la contestación pareció exasperar a Ruggeri, quien retrucó: "Tomate una pastilla hasta que te acostumbres a dormir. No me podés decir que te gusta ir a tomar algo, no es normal. Me das bronca porque no te das cuenta de la calidad que tenés. Podés jugar en la Selección, no te pierdas la chance de jugar a un Mundial. Es un pecado lo que estás haciendo, si podés salir igual, sólo que hay que saber cuándo se sale, cuándo volver a las 3 de la mañana y cuando no. Cuando logres eso, vas a llegar a la Selección".
Incluso Ruggeri le recomendó cambiar de amistades, aunque Centurión le reveló que cuando sus propios amigos le piden que no salga, él es quien les advierte que saldrá igual.
"Ojalá pueda jugar, me vaya bien y mañana me digas 'te felicito por ir al Mundial'", concluyó el jugador de Racing. Y Ruggeri terminó el descargo: "Hacía tanto tiempo que quería decirte todas estas cosas, ojalá ahora estés hablando con alguien que te puede ayudar. Y a ustedes, amigos de Centurión, déjenlo solo, no lo lleven, dormite, mirá el techo en tu cama hasta que te duermas. Pensá y te vas a dormir".