Celeste Cid "Se que lo mejor en mi vida esta por llegar"
A los 27, Celeste Cid volvió con todo. Acaba de filmar una película en Alemania y se prepara para las grabaciones de Nazareno, el lobo, la tira que protagonizará junto a Gonzalo Heredia y por la que Suar apuesta todo en el 2012.
A los 27, volvió con todo. Acaba de filmar una película en Alemania y se prepara para las grabaciones de Nazareno, el lobo, la tira que protagonizará junto a Gonzalo Heredia y por la que Suar apuesta todo en el 2012. Con look renovado, quince kilos menos y lejos de las adicciones que la acosaron hace no mucho tiempo, hoy confiesa: "Disfruto la paz y la tranquilidad que llegan con la edad".
Por Sergio Oviedo Fotos: Fabián Uset
Recorrió un largo y vertiginoso camino esta muchacha... Tenía apenas trece años cuando su mamá la llevó a un casting en Telefe -cerquita de su casa, en el barrio de San Cristóbal- y fue unas de las seis elegidas para Chiquititas... ¡entre catorce mil aspirantes! Desde entonces, 1997, no paró más: dieciséis tiras en televisión, cuatro películas, dos obras de teatro, videoclips, estudió piano, editó un libro con sus fotografías, se animó a Intimidad, un libro de poemas a punto de ver la luz. Su corazón también tuvo un gran trajín: fue novia de Nico Cabré; en 2003 conoció a Emmanuel Horvilleur y, un año después, con el rocker, fue mamá de André. Se juntó, se separó y volvió a formar pareja con Luis Ortega; luego con Joaquín Levinton; después con Fito Páez, y a fines de 2010 con otro músico, Gonzalo Aloras.
Hoy, Celeste Cid, a sus 27, carga con la experiencia de una mujer de 50. "Los primeros diez años trabajé sin parar y en un momento sentí un cansancio enorme.
Me agotó eso de tener que ser siempre 'Una cara bonita sin importar el talento y el esfuerzo'. Ahí me rebelé mal y cometí errores. Muchos errores...", confiesa hoy, mientras luce feliz como celebrity de la colección primavera-verano de la marca Hume.
"Errores", dice Celeste, e inevitablemente hay que remontarse al verano de 2009, cuando luchaba por recuperarse de sus adicciones. Había engordado quince kilos, se la veía poco saludable, era otra. "Por suerte, la ficha me cayó a tiempo". Se internó, sacó fuerzas de donde no tenía para estar bien junto a Alu -su hijo-, y volvió al ruedo. La rompió en Para vestir santos (El Trece) y el regreso al trabajo le ordenó la vida. Bajó de peso, cambió su look y estudió alemán para la filmación de la película dejeanine Meerapfel, El amigo alemán. Feliz, mientras espera ese estreno, se prepara para las grabaciones de Nazareno, el lobo, tira que protagonizará junto a Gonzalo Heredia por El Trece.
Acá está Celeste, impecable, puntual y con una enorme sonrisa, que llegó a esta entrevista acompañada por su amigo Edgardo Polaco Moreno (quien organizó la inauguración del local de Fiume en Las Cañitas).
-¿Cómo hacés para motivarte con cada proyecto después de casi quince años de carrera?
-El secreto está en elegir muy bien los trabajos. No le digo a todo que sí y siempre intento que la historia me provoque algo. Soy muy intuitiva con eso.
-¿Nunca te pasó que cuando estaba en marcha no era lo que habías imaginado y te aburrías?
-Sí, pero si me gana el tedio, trato de buscarle la vuelta por otro lado. Por ejemplo, la música, la literatura o el collage. A veces hago exposiciones con mis creaciones porque me encanta difundir esa veta artística.
-En el trabajo todo se te dio muy rápido. ¿Sentís que en tu vida también?
-Por ahí, si lo miras desde afuera, te puede dar esa sensación.
Fui mamá muy joven -a los 21- y eso te acelera muchas cosas. Pero también antes las mujeres se casaban a los 18 años y a los 20 tenían uno o dos hijos. Y creo que está bien que sea así: ¡Lo recomiendo! -¿Por qué lo decís? -Porque ser mamá joven te da vitalidad, aprendes un montón de cosas y además te das cuenta, ante las responsabilidades, que "no te las sabés todas". Vos crecés a la par de tu hijo, y eso no te lo enseña nadie.
-¿Cómo es André?
-Está mal que lo diga yo, pero es un nene precioso, le gusta mucho el fútbol, hincha fanático de Vélez, ve todos los partidos que dan por la tele y si encuentra un DVD que hable de fútbol lo compra y lo mira.
-E imagino que también juega...
-Sí, va a una escuelita de fútbol en Colegiales. ¡Es delantero y la rompe! -¿Sos de esas mamas histéricas que van los sábados a los partidos y se ponen locas en las tribunas? -No, soy muy tranquila (carcajadas). Vamos con el papá y lo dejamos que sea Alu quien vibre en la cancha.
-¿Volviste a formar pareja?
-No, estoy sola, pero no pierdo las esperanzas de enamorarme nuevamente.
-Con todo lo que has vivido, ¿puede ser que te aburra un chico de tu edad? -No... Bah, en realidad nunca me lo puse a pensar.
Tampoco es que viví taaaanto. ¡Creo que lo mejor está por llegar! Hay un montón de cosas que recién las estoy viviendo ahora. Siento que a los 27 soy otra persona. Ya pasé la edad donde todo era revoltoso y hacés cosas que te dejan con el c... mirando para el norte. ¡Hoy disfruto la paz y la tranquilidad que vienen con la edad!
-¿Qué cosas llegan con la edad? -Te cambian los rasgos de la cara, la sensualidad, la experiencia que tenés.
-¿Por eso te seducen los hombres mayores que vos?
-Es verdad, siempre tuve relaciones con gente más grande. Hummm... Debe ser por eso que he tenido experiencias de todo tipo y color (carcajadas).
-¿Una de esas parejas fue Fito Páez?
-Sí, tuvimos una muy linda relación y me ayudó mucho.
Es muy compañero y hoy es un gran amigo.
-Además llegó en un momento duro de tu vida. ¿Fue tu sostén para la recuperación a tus adicciones?
-Sí, pero creo que para eso están las parejas. Vos ayudas y viceversa.
-¿Por qué creés que hoy estás sola?
-Porque estoy en un momento que quiero transitar sola.
Estoy armando mi casa, es la primera vez que construyo y puedo decidir cosas en mi hogar. Hoy, por mí y por mi hijo, siento que eso es muy importante.
-¿Lo llevas al colegio, vas a las reuniones de padres?
-Sí, a pleno. Ahora lo estamos ayudando con el papá, porque actúa en una obra de Disney en la escuela que será totalmente en inglés.
-¿Tiene pasta de actor?
-En verdad, lo veo muy futbolista, ese es su mundo.
Igual lo voy a apoyar en todo lo que decida.
-¿Te gustaría volver a ser mamá?
-Seguro, cuando encuentre la pareja ideal...
-Ya hiciste muchas cosas, Celeste. ¿Qué te queda por cumplir?
-Quiero vivir la vida y disfrutar de las cosas simples y cotidianas.
Me encanta hacer las compras, ocuparme de mi casa, esas pavadas que sirven para uno, para tus seres queridos y para una futura pareja que, seguramente, vendrá muy pronto.