Cayó un "pai" pervertido que violó a cinco chicas en Varela
Las adolescentes tienen entre 15 y 18 años. El hombre las atraía diciéndoles que les brindaría ayuda espiritual. Las adormeció con un somnífero y después las violó.
Un hombre que se hacía pasar por "pai" de una congregación que profesaba el culto a "San La Muerte" fue detenido por el abuso sexual de cinco chicas, de entre 15 y 18 años. Lo acusaron de haberlas captado con argumentos "religiosos" para suministrarles un somnífero para violarlas, en el partido bonaerense de Florencio Varela.
Según fuentes policiales, el hombre, que usaba su vivienda como sede para los abusos y al que los vecinos le atacaron la casa al enterarse de lo ocurrido, cometió al menos cinco hechos similares en los últimos seis meses y, en muchos casos, reiteró los ataques a las mismas víctimas.
La investigación, encomendada a la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes, comenzó con la denuncia de abuso de una de las víctimas y finalizó con la aprehensión del acusado en su propia vivienda de Florencio Varela, adonde vivía con su familia.
Se estableció durante la pesquisa que el acusado -que se hacía llamar "pai Hernán"- tenía una gran capacidad de persuasión sobre las adolescentes y les decía que les brindaría ayuda espiritual brindarles una supuesta ayuda espiritual para luego abusar de ellas.
En el marco de esas ceremonias, el "pai Hernán" les daba de beber a sus víctimas algo que parecía ser agua pero que, en realidad, contenía una sustancia que les hacía perder el conocimiento a los pocos instantes.
Para adormecer a las víctimas, también simulaba lavarse las manos con una falsa agua bendita que en realidad era un somnífero y, cuando se las apoyaba sobre la nariz y la boca a sus fieles para "sanarlas", éstas se desvanecían, detallaron las fuentes. Cuando las jóvenes estaban en situación de indefensión, el falso "pai" abusaba sexualmente de ellas.
Cuando se conoció en el barrio que este depravado había montado un falso santuario en su casa y abusó de las chicas, los vecinos destrozaron su vivienda. Luego, cuando el supuesto "pai" supo que era investigado por la Justicia huyó de su domicilio y la policía dispuso implementar distintos operativos de búsqueda y una vigilancia encubierta en las inmediaciones de su casa.
El sábado último, el hombre retornó a su casa y cuando se retiró fue interceptado y detenidos por los investigadores de la DDI de Quilmes.
Según fuentes policiales, el hombre, que usaba su vivienda como sede para los abusos y al que los vecinos le atacaron la casa al enterarse de lo ocurrido, cometió al menos cinco hechos similares en los últimos seis meses y, en muchos casos, reiteró los ataques a las mismas víctimas.
La investigación, encomendada a la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes, comenzó con la denuncia de abuso de una de las víctimas y finalizó con la aprehensión del acusado en su propia vivienda de Florencio Varela, adonde vivía con su familia.
Se estableció durante la pesquisa que el acusado -que se hacía llamar "pai Hernán"- tenía una gran capacidad de persuasión sobre las adolescentes y les decía que les brindaría ayuda espiritual brindarles una supuesta ayuda espiritual para luego abusar de ellas.
En el marco de esas ceremonias, el "pai Hernán" les daba de beber a sus víctimas algo que parecía ser agua pero que, en realidad, contenía una sustancia que les hacía perder el conocimiento a los pocos instantes.
Para adormecer a las víctimas, también simulaba lavarse las manos con una falsa agua bendita que en realidad era un somnífero y, cuando se las apoyaba sobre la nariz y la boca a sus fieles para "sanarlas", éstas se desvanecían, detallaron las fuentes. Cuando las jóvenes estaban en situación de indefensión, el falso "pai" abusaba sexualmente de ellas.
Cuando se conoció en el barrio que este depravado había montado un falso santuario en su casa y abusó de las chicas, los vecinos destrozaron su vivienda. Luego, cuando el supuesto "pai" supo que era investigado por la Justicia huyó de su domicilio y la policía dispuso implementar distintos operativos de búsqueda y una vigilancia encubierta en las inmediaciones de su casa.
El sábado último, el hombre retornó a su casa y cuando se retiró fue interceptado y detenidos por los investigadores de la DDI de Quilmes.