Caso Belsunce: Declara el médico que realizó la autopsia a María Marta
Uno de los profesionales de salud de la Policía Científica de San Isidro que realizó la autopsia al cuerpo de María Marta García Belsunce, declarará hoy ante el Tribunal Oral Criminal 1, en el juicio por el encubrimiento del homicidio.
Héctor Moreira, uno de los médicos de la Policía Científica de San Isidro que participó de la autopsia practicada el 2 de diciembre de 2002, 36 días después del crimen, en la Morgue Judicial de Capital Federal.
Moreira iba a declarar ayer aunque, por una cuestión de tiempo, el tribunal y las partes acordaron que su testimonio pasara para hoy.
No obstante, el estudio forense realizado al cuerpo de la socióloga asesinada el 27 de octubre del 2002 en su casa del country Carmel fue en la audiencia de ayer también objeto de debate.
Es que el momento clave en el que los forenses descubrieron la existencia de cinco proyectiles dentro del cráneo María Marta no quedó grabado en el video de la autopsia porque se acabó un casete, según contó el perito a cargo de esa grabación.
El testigo que se refirió a la autopsia y motivó que ayer se exhibiera en la sala parte del video fue el perito fotógrafo de la Policía Científica encargado de grabarla, Enrique Chiogna.
El video -que ya había sido exhibido en el primer juicio por el caso realizado al viudo Carlos Carrascosa-, muestra imágenes muy crudas, motivo por el cual los dos únicos imputados que estaban en la sala, Guillermo Bártoli y Horacio García Belsunce, pidieron retirarse.
El testigo recordó que tras la exhumación del cadáver del cementerio de La Recoleta y el traslado del ataúd a la morgue de la calle Viamonte, utilizó lo que describió como una "vieja máquina" de video marca Panasonic con la que grabó la autopsia.
Aclaró que la fecha y hora que figuran en la grabación -13/9/2002 a las 11.17- no se correspondían con la realidad por un defecto técnico que tenía el propio reloj de la cámara.
El primer cruce de los fiscales Laura Zyseskind, Leonardo Loiterstein y Daniel Márquez con los defensores fue cuando el abogado de Bártoli, Alejandro Novak, pidió que se exhiba la prueba en su soporte original, un VHS, y no el DVD que los representantes del Ministerio Público proyectaban desde una laptop.
Los defensores siempre sospecharon el motivo por el cual el video que está en la causa se interrumpe justo en el momento en el que los forenses están aserrando la calota (apertura del cráneo) y se reinicia cuando ya exhiben los cinco proyectiles calibre 32 encontrados dentro de la cabeza de la víctima.
El misterio lo aclaró el testigo cuando reconoció que, en medio de la autopsia, se le acabó el casete y tuvo que ir a comprar otro VHS.
Para la defensa, ése es un momento clave de la autopsia porque -si bien ayer no se vio esa parte de la grabación- al examinar los orificios que María Marta presentaba en la cabeza se los escucha hablar de las canillas con las que se habría golpeado la víctima y recién se dan cuenta de que se trata de balazos cuando encuentran los cinco plomos dentro del cráneo.
El argumento de la defensa es que si ni siquiera forenses expertos se dieron cuenta de que la víctima estaba baleada al ver la cabeza ya rasurada sin pelo y lo advirtieron recién cuando encontraron los proyectiles, cómo es posible que los familiares se percataran de que lo de María Marta era un asesinato.
Para hoy se espera que el médico legista Moreira aclare las dudas respecto a qué se dijo mientras se realizaba la necropsia.