Caso Ángeles Rawson: postergan otra vez la declaración de la supuesta testigo falsa
Beatriz Nicolasa Fuentes había sido citada pero no pudo viajar desde Caleta Olivia, donde reside.
La declaración de la supuesta testigo falsa de la investigación por el homicidio de la adolescente Angeles Rawson, Beatriz Nicolasa Fuentes, fue nuevamente postergada para el 7 de noviembre próximo porque la mujer no pudo viajar desde Caleta Olivia, donde reside.
Así lo confirmó a DyN su abogado, Sergio D'Amico, quien ayer -cuando debía realizarse la indagatoria- presentó documentación que acredita que Fuentes no pudo viajar pero tiene pasaje emitido para llegar a Buenos Aires el 6 de noviembre, y regresar el 8.
Fuentes debe declarar como imputada en la causa 33.765/2013, que está a cargo del juez Jorge Di Santo y la indagatoria se realizará como derivación del expediente principal por el crimen de Angeles, Javier Ríos.
El trámite debió haberse cumplido a principios de octubre, pero fue inicialmente postergada para el 30, luego para el 31 y finalmente, para el 7 de noviembre.
Fuentes quedó involucrada en la causa tras decir que había escuchado una discusión entre Angeles Rawson, su madre y su padrastro, Sergio Opatowski, el día de la desaparición de la joven, en el edificio de Palermo.
Fuentes tomó contacto con un periodista en la Capital Federal para contarle que había escuchado, el día en que desapareció Angeles, una discusión intrafamiliar en el departamento en el que vivía la niña por un supuesto "abuso sexual", lo que fue desmentido por todos los vecinos e, incluso, ella misma reconoció ante el juez Ríos que su versión era inexacta.
El delito de "falso testimonio" contempla, según el Código Penal, penas que pueden llegar hasta los diez años de prisión.
Angeles Rawson, de 16 años, desapareció en la mañana del 10 de junio pasado cuando regresaba de su clase de gimnasia y su cuerpo fue encontrado al día siguiente, en el predio del CEAMSE, en José León Suárez.
Aunque en un primer momento la pesquisa se orientó hacia una agresión por parte de un desconocido, la fiscal María Paula Asaro centró sus sospechas en el circulo íntimo de la víctima cuando se descubrió que la menor había regresado al edificio, según se pudo ver en una cámara de seguridad de la zona.
El viernes 14 de junio, cuando toda la familia de Angeles estaba siendo interrogada, fue llevado por la fuerza a declarar el portero Jorge Mangeri -quien no se había presentado pese a las reiteradas citaciones- y en una sorpresiva confesión tras incurrir en diversas contradicciones dijo: "fui yo".
Mangeri quedó detenido y luego las pruebas de ADN confirmaron que bajo las uñas de la menor -pese la contaminación que sufrió el cadáver- habían quedado rastros genéticos del portero.
Así lo confirmó a DyN su abogado, Sergio D'Amico, quien ayer -cuando debía realizarse la indagatoria- presentó documentación que acredita que Fuentes no pudo viajar pero tiene pasaje emitido para llegar a Buenos Aires el 6 de noviembre, y regresar el 8.
Fuentes debe declarar como imputada en la causa 33.765/2013, que está a cargo del juez Jorge Di Santo y la indagatoria se realizará como derivación del expediente principal por el crimen de Angeles, Javier Ríos.
El trámite debió haberse cumplido a principios de octubre, pero fue inicialmente postergada para el 30, luego para el 31 y finalmente, para el 7 de noviembre.
Fuentes quedó involucrada en la causa tras decir que había escuchado una discusión entre Angeles Rawson, su madre y su padrastro, Sergio Opatowski, el día de la desaparición de la joven, en el edificio de Palermo.
Fuentes tomó contacto con un periodista en la Capital Federal para contarle que había escuchado, el día en que desapareció Angeles, una discusión intrafamiliar en el departamento en el que vivía la niña por un supuesto "abuso sexual", lo que fue desmentido por todos los vecinos e, incluso, ella misma reconoció ante el juez Ríos que su versión era inexacta.
El delito de "falso testimonio" contempla, según el Código Penal, penas que pueden llegar hasta los diez años de prisión.
Angeles Rawson, de 16 años, desapareció en la mañana del 10 de junio pasado cuando regresaba de su clase de gimnasia y su cuerpo fue encontrado al día siguiente, en el predio del CEAMSE, en José León Suárez.
Aunque en un primer momento la pesquisa se orientó hacia una agresión por parte de un desconocido, la fiscal María Paula Asaro centró sus sospechas en el circulo íntimo de la víctima cuando se descubrió que la menor había regresado al edificio, según se pudo ver en una cámara de seguridad de la zona.
El viernes 14 de junio, cuando toda la familia de Angeles estaba siendo interrogada, fue llevado por la fuerza a declarar el portero Jorge Mangeri -quien no se había presentado pese a las reiteradas citaciones- y en una sorpresiva confesión tras incurrir en diversas contradicciones dijo: "fui yo".
Mangeri quedó detenido y luego las pruebas de ADN confirmaron que bajo las uñas de la menor -pese la contaminación que sufrió el cadáver- habían quedado rastros genéticos del portero.