Caso Ángeles Rawson: hallaron solo uno de los cuatro contenedores que buscaba el juez Ríos
El magistrado que entiende en la causa ordenó el peritaje de varios tachos donde se tira la basura, pero solo encontraron uno.
Sólo uno de los cuatro contenedores de basura cercanos al domicilio de Ángeles Rawson, que el juez de instrucción Javier Ríos ordenó secuestrar, pudo ser hallado anoche para ser peritado y determinar si allí fue depositado el cuerpo de la víctima.
Fuentes policiales informaron que el único de los contenedores encontrados anoche por los detectives de la División Homicidios fue el de la calle Arévalo entre Guatemala y Paraguay.
En el punto 50 de las 52 medidas dispuestas ayer por el magistrado, Ríos le ordenó a la policía "el inmediato secuestro" de ese contenedor de la calle Arévalo y también los ubicados en Soler entre Angel Carranza y Ravignani, y avenida Santa Fe entre Carranza y Ravignani.
Sin embargo, los voceros policiales explicaron que estos dos últimos contenedores anoche no estaban en el lugar porque ésa es una zona de recolección manual de residuos.
"Cuando se hizo el relevamiento de contenedores cercanos, se hallaron los tres que el juez ordenó secuestrar, pero anoche se confirmó que el de Soler y el de Santa Fe nunca debieron estar ahí porque ésa es zona de recolección manual", dijo un jefe policial.
"Lo que nos explica la empresa es que hay vecinos que viven en zonas de recolección manual que quieren tener contenedores en su cuadra para no tener que dejar la basura en la calle. Muchas veces esos vecinos llevan hasta la puerta de su casa un contenedor que está asignado a otro sitio y la empresa cuando lo detecta, los levanta y vuelve a colocar en el lugar de destino", explicó el mismo investigador.
Por eso anoche, la policía solo pudo hallar el contenedor de la calle Arévalo, que fue trasladado a la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal, en General Paz y Madariaga, para ser peritado.
El juez ordenó además que los contenedores sean peritados por la División Laboratorio Químico de la Policía Federal "a fin de determinar la existencia de restos hemáticos, cabellos u otros fluidos corporales con el objeto de realizar un análisis pericial comparativo, morfológico y de ADN con las muestras de la víctima y el imputado".
En otro de los puntos, el número 17 de la batería de medidas, Ríos también le ordenó a los detectives de Homicidios que averigüen si existe un contenedor de residuos en la avenida Santa Fe y Arévalo, es decir a la vuelta del edificio de Ravignani 2360 donde vivían la víctima y el imputado Jorge Mangeri.
El magistrado también solicitó que se determine si hay en ese sitio cámaras de seguridad públicas o privadas que hayan podido captar los movimientos del lugar a partir de las 20 del 10 de junio, día del crimen.
Sin embargo, fuentes policiales señalaron que anoche pudo determinarse que ésa también en una cuadra de recolección manual de residuos donde nunca existió este cuarto contenedor.
Fuentes policiales informaron que el único de los contenedores encontrados anoche por los detectives de la División Homicidios fue el de la calle Arévalo entre Guatemala y Paraguay.
En el punto 50 de las 52 medidas dispuestas ayer por el magistrado, Ríos le ordenó a la policía "el inmediato secuestro" de ese contenedor de la calle Arévalo y también los ubicados en Soler entre Angel Carranza y Ravignani, y avenida Santa Fe entre Carranza y Ravignani.
Sin embargo, los voceros policiales explicaron que estos dos últimos contenedores anoche no estaban en el lugar porque ésa es una zona de recolección manual de residuos.
"Cuando se hizo el relevamiento de contenedores cercanos, se hallaron los tres que el juez ordenó secuestrar, pero anoche se confirmó que el de Soler y el de Santa Fe nunca debieron estar ahí porque ésa es zona de recolección manual", dijo un jefe policial.
"Lo que nos explica la empresa es que hay vecinos que viven en zonas de recolección manual que quieren tener contenedores en su cuadra para no tener que dejar la basura en la calle. Muchas veces esos vecinos llevan hasta la puerta de su casa un contenedor que está asignado a otro sitio y la empresa cuando lo detecta, los levanta y vuelve a colocar en el lugar de destino", explicó el mismo investigador.
Por eso anoche, la policía solo pudo hallar el contenedor de la calle Arévalo, que fue trasladado a la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal, en General Paz y Madariaga, para ser peritado.
El juez ordenó además que los contenedores sean peritados por la División Laboratorio Químico de la Policía Federal "a fin de determinar la existencia de restos hemáticos, cabellos u otros fluidos corporales con el objeto de realizar un análisis pericial comparativo, morfológico y de ADN con las muestras de la víctima y el imputado".
En otro de los puntos, el número 17 de la batería de medidas, Ríos también le ordenó a los detectives de Homicidios que averigüen si existe un contenedor de residuos en la avenida Santa Fe y Arévalo, es decir a la vuelta del edificio de Ravignani 2360 donde vivían la víctima y el imputado Jorge Mangeri.
El magistrado también solicitó que se determine si hay en ese sitio cámaras de seguridad públicas o privadas que hayan podido captar los movimientos del lugar a partir de las 20 del 10 de junio, día del crimen.
Sin embargo, fuentes policiales señalaron que anoche pudo determinarse que ésa también en una cuadra de recolección manual de residuos donde nunca existió este cuarto contenedor.