Caso Ángeles Rawson: el juez duda de todo, ¿duda de él?
A casi 70 días, el caso Ángeles tiene más dudas que certezas. Tantas son las dudas, que el propio juez de la causa, Javier Ríos, ordenó una nueva junta médica con 72 puntos de pericia.
Traducido: no tiene claro como murió Ángeles. No sabe si la golpearon, no sabe si la abusaron, no sabe...
Tantas son las dudas que el juez hasta pregunta por la sexualidad de Ángeles. Como si fuera poco, le pregunta a los expertos si el material biológico encontrado en las uñas de la víctima puede ser reperitado. Todo lo pregunta otra vez. Pide precisiones que tal vez nunca aparezcan.
El tema de las uñas no es menor. Es que justamente en tres de las uñas de una mano de Ángeles se encontró ADN de Jorge Mangeri, el único acusado del crimen. Y justamente, la defensa cuestiona esa prueba genética. Argumenta que el cotejo dio positivo por contaminación y por fallas en la cadena de custodia. El juez pregunta entonces si se puede reperitar. Si la respuesta es no, la conclusión es que no hay contraprueba posible.
Así, las cosas, los expertos del Cuerpo Médico Forense deben decidir si exhuman el cuerpo de Ángeles para hacer una nueva autopsia. La Junta Médica tiene plazo de 10 días para entregar su informe final. Todo esto pasa con un agregado, el médico Félix Konopka, que hizo la autopsia, cuestionado por muchos, fue apartado de esta nueva junta de peritos.
Hasta hoy, los expertos oficiales, dicen que Ángeles no fue abusada y que murió en la compactadora. Para el juez se trató de un caso de homicidio calificado por alevosía. Pero hay un dato, en un caso con la misma calificación, la Sala VI de la Cámara del Crimen, que ahora debe revisar el procesamiento de Mangeri, falló que no hay alevosía cuando la víctima tuvo mínima chance de defensa. Y Ángeles, tuvo justamente la chance de resistir y de arañar a su atacante.
En Tribunales algunos razonan que como el juez sabe que la Cámara no va a confirmar el procesamiento por homicidio con alevosía, hará su último intento por probar otro agravante: el ataque sexual. Si no logra probar ningún agravante, Mangeri podría ser procesado por homicidio simple.
El dato no es menor. Cualquier homicidio calificado tiene la pena de perpetua. El homicidio simple: penas de 8 a 25 años. A esta altura del caso, una diferencia abismal que podría favorecer al portero sospechado.
Tantas son las dudas que el juez hasta pregunta por la sexualidad de Ángeles. Como si fuera poco, le pregunta a los expertos si el material biológico encontrado en las uñas de la víctima puede ser reperitado. Todo lo pregunta otra vez. Pide precisiones que tal vez nunca aparezcan.
El tema de las uñas no es menor. Es que justamente en tres de las uñas de una mano de Ángeles se encontró ADN de Jorge Mangeri, el único acusado del crimen. Y justamente, la defensa cuestiona esa prueba genética. Argumenta que el cotejo dio positivo por contaminación y por fallas en la cadena de custodia. El juez pregunta entonces si se puede reperitar. Si la respuesta es no, la conclusión es que no hay contraprueba posible.
Así, las cosas, los expertos del Cuerpo Médico Forense deben decidir si exhuman el cuerpo de Ángeles para hacer una nueva autopsia. La Junta Médica tiene plazo de 10 días para entregar su informe final. Todo esto pasa con un agregado, el médico Félix Konopka, que hizo la autopsia, cuestionado por muchos, fue apartado de esta nueva junta de peritos.
Hasta hoy, los expertos oficiales, dicen que Ángeles no fue abusada y que murió en la compactadora. Para el juez se trató de un caso de homicidio calificado por alevosía. Pero hay un dato, en un caso con la misma calificación, la Sala VI de la Cámara del Crimen, que ahora debe revisar el procesamiento de Mangeri, falló que no hay alevosía cuando la víctima tuvo mínima chance de defensa. Y Ángeles, tuvo justamente la chance de resistir y de arañar a su atacante.
En Tribunales algunos razonan que como el juez sabe que la Cámara no va a confirmar el procesamiento por homicidio con alevosía, hará su último intento por probar otro agravante: el ataque sexual. Si no logra probar ningún agravante, Mangeri podría ser procesado por homicidio simple.
El dato no es menor. Cualquier homicidio calificado tiene la pena de perpetua. El homicidio simple: penas de 8 a 25 años. A esta altura del caso, una diferencia abismal que podría favorecer al portero sospechado.