¿Casadas con la mafia?
Nuevamente un caso político salpica a gente de la farándula. Mujeres que salen a bancar a sus maridos; que están en el ojo de la tormenta.
Dos mujeres; dos casos; dos escándalos en uno. Farándula y política vuelven a juntarse con los maridos de estas famosas conocidas, expuestas, lindas y polémicas. No es la primera vez que hombres de dudoso pasado y/o presente, tienen perfectas pantallas casándose con ellas.
Uno de los casos que se destaparon en las últimas horas tenía todos los antecedentes e incógnitas sobre quién era y qué hacía; de dónde había sacado la plata ese muchacho que un día irrumpió casándose en tiempo récord con una de las mujeres más lindas de la Argentina.
Pero el otro caso sorprendió: cholulo y nunca muy sabidos sus negocios, el personaje siempre entre ridículo y tilingo de su mujer, inocente en principio, no daba la menor sospecha aunque nunca se sabía muy bien en qué andaba; pero envidiado por estar a su lado.
Están en el ojo de la tormenta. Son horas en que quizás el silencio valga más que palabras cuando defenderse puede resultar aún más sospechoso. Si nada tienen que ver ¿aclarar oscurece?
Nadie duda de la calidad humana ni artística de la gente; de su trayectoria y de la vida que han mostrado. Pero una vez más historias colaterales las salpican. Tiempo de dudas e investigaciones; tiempo de que la justicia haga su parte. Ellas, otra vez, parece que están durmiendo con el enemigo.
Uno de los casos que se destaparon en las últimas horas tenía todos los antecedentes e incógnitas sobre quién era y qué hacía; de dónde había sacado la plata ese muchacho que un día irrumpió casándose en tiempo récord con una de las mujeres más lindas de la Argentina.
Pero el otro caso sorprendió: cholulo y nunca muy sabidos sus negocios, el personaje siempre entre ridículo y tilingo de su mujer, inocente en principio, no daba la menor sospecha aunque nunca se sabía muy bien en qué andaba; pero envidiado por estar a su lado.
Están en el ojo de la tormenta. Son horas en que quizás el silencio valga más que palabras cuando defenderse puede resultar aún más sospechoso. Si nada tienen que ver ¿aclarar oscurece?
Nadie duda de la calidad humana ni artística de la gente; de su trayectoria y de la vida que han mostrado. Pero una vez más historias colaterales las salpican. Tiempo de dudas e investigaciones; tiempo de que la justicia haga su parte. Ellas, otra vez, parece que están durmiendo con el enemigo.