Carlos Ahumada Kurtz, el polémico amigo mexicano de los Grondona involucrado en las escuchas
El empresario apareció en las escuchas. El mexicano preside Estudiantes de San Luis con el cual ascendió 4 divisiones en 3 años.
Carlos Ahumada Kurtz, actual presidente del club Estudiantes de San Luis, apareció en las escuchas que se difundieron en la televisión en los últimos días. El club ascendió cuatro veces en tres años. "El único (club) que me preocupa es Estudiantes de San Luis", dijo el fallecido Julio Grondona en diálogo con Gustavo Ceresa, titular del Consejo Federal de la AFA.
También conocido como "el señor de los sobornos", el empresario nació en Córdoba y se fue a los 9 años a México, donde se nacionalizó. Nadie sabe de dónde sacó tanto dinero para poner en el club puntano. Sus amigos cuentan que administra una fortuna de 500 millones de dólares y que tiene un penthouse en Recoleta.
Luego de las escuchas, el mexicano salió a declarar y a defender a su club: "El ascenso de Estudiantes no se mancha", dijo Ahumada en FM Ciudad de San Luis. "Lo hicimos por amor a la camiseta. Hablan porque Don Julio no se puede defender".
Además, Ahumada estuvo preso tres años en México y en Cuba y lo acusaron de lavado de dinero, de fraude y de vínculos con el Cartel de Juárez. Quedó en libertad en 2007, pero pidieron su captura internacional por "el tendal" que dejó en el León (también fue dueño del Santos Laguna).
Como gerenciador del Club Talleres de Córdoba protagonizó una fuga ante su inminente detención. En el 2008 fue detenido por presunto fraude por personal de Interpol cuando intentaba fugarse de un departamento escondido en el baúl de un automóvil conducido por su amigo, el ex jugador Martín Vilallonga.
Ahumada era el titular de Ateliers S.A., gerenciadora del devastado y quebrado club cordobés. Después de su revoltoso paso por Talleres, en 2010, fue presidente del club Juventud Unida Universitario de la tercera división argentina. Cargo que abandonó en junio del 2011 por expresa petición de los dirigentes, a través de su asesor legal rescindían el contrato con Promotora Deportiva.
Este enigmático personaje está siempre acompañado por guardaespaldas (entre ellos Carlos Góngora, un ex jefe de policía de Córdoba) y no aparece en ningún registro público como integrante de una empresa en San Luis. Por este motivo, la AFIP ni lo investiga.