Buenos Aires, un caos de ruido
El ruido es una contaminación que no se ve pero que se siente y trae peligros para la salud.
Las bocinas, los colectivos, la gente, las construcciones, todo genera ruido. Todas estas características pertenecen a las grandes ciudades y Buenos Aires no es la excepción. La Capital es una de las ciudades más ruidosas y sus niveles auditivos están por encima de los recomendables.
Según mediciones oficiales, el 86 % de los casos las estaciones marcan más de 70 decibeles, un nivel máximo recomendado. Por ejemplo, una situación cotidiana en donde mide esa cantidad de ruido es cuando hay una aspiradora prendida. Hay partes de la Ciudad que se equiparan con el Aeroparque Metropolitano.
Las intersecciones más ruidosas son: Rivadavia en el cruce con Castro Barros y Santa Fe y Callao, con un promedio de 77 decibeles durante un día entero. Cabildo y Juramento es otro cruce complicado y con mucho ruido ensordecedor. Por último, Beiró y Chivilcoy es el otro punto más ruidoso de la Ciudad. Los lugares más tranquilos son en Pompeya y Parque Avellaneda, aunque con 60 decibeles de promedio, un número muy alto para el oído humano.