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Brutal crimen de un joven de 18 años en Grand Bourg

Una patota lo golpeó salvajemente, lo ató a una camioneta y lo arrastró por el camino, para luego dejarlo tirado en una zanja.

"Estábamos durmiendo, el miércoles a la madrugada, cuando un primo vino a casa gritando que habían atacado a mi hermano. Salimos corriendo a buscarlo, y lo encontramos a unas cinco cuadras. Estaba tirado en una zanja, casi desnudo, mojado y todo golpeado. Cuando lo vi ahí no lo podía creer. Estaba irreconocible", fue el relato de Sergio, hermano de un joven de 18 años que murió tras un salvaje ataque de una patota.

"Había salido de mi casa para visitar a su novia, y en el camino se cruzó con un primo y un amigo, con quienes se quedó hablando un rato, cuando de pronto llegaron nueve personas de una patota del barrio, que vienen haciendo desastres", prosiguió el hermano de la vícitima.

Los jóvenes que acompañaban al difunto escaparon en bicicleta, por lo que la patota lo golpeó hasta dejarlo con fracturas en todo el cuerpo. Apenas respiraba cuando lo encontró su familia, y se ahogaba con su propia sangre, según contó su hermano.

La familia vio pasar un móvil policial cuando encontró al muchacho de 18 años, tuvieron que converncerlos para transportar al joven agonizando a un hospital.

Las horas finales fueron dramáticas, según expresó el hermano: "Llegó muy grave, le hicieron una tomografía. Durante dos horas no tenía señales de vida. Los médicos nos dijeron que podían operarlo. Estábamos en eso cuando dejó de respirar. Mis padres entraron para firmar el acta, pero él movió la mano. El cerebro aguantaba. Como los golpes fueron muchos en la cabeza el cerebro se hinchó y ya no tenía espacio. Por eso lo operaron. Pero no aguantó y murió".

Según las declaraciones citadas por Diario Popular, el hermano del muchacho asesinado pidió que todos los testigos posibles aporten su declaración, dado que la banda que mató al joven ya tenía antecedentes de agresiones.