Brutal asalto a jubilados en La Plata

Los integrantes de un matrimonio de jubilados, ambos de 77 años, fueron víctimas de un violento asalto en su casa de esta ciudad, donde dos delincuentes los amenazaron con armas de fuego, les robaron 800 dólares y 3.000 pesos y hasta se tomaron tiempo para comer galletitas.

Tras el robo, los asaltantes escaparon llevándose el botín –que pertenecía al hijo del matrimonio, un hombre de 50 años que vive en la planta baja de la misma propiedad- y hasta el momento la Policía no había logrado detener a los delincuentes.

Las víctimas del asalto fueron identificadas como Juan Volech y su esposa, Gloria De Michelis, ambos de 77 años, a quienes los delincuentes sorprendieron cuando regresaban a su casa a bordo de su auto.

En un momento, ante la mirada de su mujer, los delincuentes tenían a su marido tomado por el cuello, mientras le apoyaban una pistola en el estómago y le exigían: "Dame platita porque te hago".

Todo se produjo en la noche del sábado pasado en una casa del barrio El Mondongo de esta ciudad, y la pesadilla para los jubilados duró cerca de media hora, según lo relatado por las víctimas al diario El Día de esta ciudad.

De acuerdo con lo indicado, durante ese lapso, los asaltantes se manejaron con "total impunidad", al punto de que tuvieron tiempo para comer y hasta para ponerse ropa de uno de los hijos de las víctimas, que se llevaron puesta.

Alrededor de las 20:30, Volech estaba entrando el auto en el garaje de la vivienda, cuando intempestivamente se le aparecieron dos individuos.

Sin darle tiempo a nada, uno de ellos "lo agarró por la espalda, le presionó el cuello con su brazo y con el otro le apoyó un arma en el cuerpo", se indicó.

Los delincuentes, que tenían entre 25 y 30 años, obligaron al jubilado a entrar con ellos a la vivienda de la planta baja, que pertenece al abogado Guillermo Volech, de 50 años, hijo del matrimonio, quien no se encontraba en el lugar.

"Lo primero que vieron (los ladrones) fue la habitación. Se metieron ahí y lo tiraron a mi papá en la cama. Después se pusieron a revolver todo, buscaban plata. Se llevaron unos ahorros que yo tenía, pero insistentemente les pedían más dinero", señaló Guillermo Volech.

Luego de desordenar las habitaciones, los individuos fueron a la cocina y estuvieron algunos minutos comiendo galletitas y otros alimentos que encontraron en el lugar.

De Michelis, en tanto, agregó: "Se pusieron hasta la ropa de mi hijo. Tranquilos, como si nada pasara. No me olvido más en la vida".

Hasta ese momento, Gloria permanecía en la planta alta de la propiedad, sin enterarse de lo que estaba sucediendo: fue entonces cuando los delincuentes decidieron subir junto a Volech, para revisar el otro sector de la vivienda.

"Mientras subíamos atiné a gritar para que Gloria no se lleve la sorpresa de golpe", explicó Volech, en diálogo con El Día.

Una vez arriba, los delincuentes también le pusieron un arma en la cabeza a la mujer, mientras le exigían dinero.

Luego de varios minutos de terror, los sospechosos se dieron a la fuga en una moto que habían dejado estacionada en la puerta de la casa.

Las víctimas remarcaron que la Policía llegó de inmediato al lugar y montó un fuerte operativo para tratar de localizar a los delincuentes, aunque hasta el momento seguían prófugos.