Breque: "Sólo por Calamaro sería parte del Bailando"
La joven novia de "El Salmón" habló sobre una posible participación en el programa de Marcelo Tinelli.
La ex chica Playboy y figura de Life Chekka, Micaela Breque (23) habló de su vida cotidiana junto al popular músico Andrés Calamaro (50).
La rubia asegura que el rol de conejita es exclusivo de su trabajo. Cuando vuelve al hogar después de un arduo día laboral como modelo y actriz, Micaela es una chica común que disfruta de las tareas diarias de cocinar, limpiar y ordenar.
"Cuando trabajo soy conejita, pero cuando llego a mi casa ya no. Nunca me imaginé que iba a terminar en ese lugar. Al principio me costó, pero después me animé porque soy muy lanzada".
La vida común de pareja con el cantante varía según los días: "No somos rutinarios. Yo soy menos rutinaria que él, hago muchos castings y tomo clases de jazz contemporáneo, por placer. Entre una cosa y otra voy y vengo todo el día y él está siempre tranquilo entre nuestra casa de Benavídez y la de Capital Federal".
Y añadió: "Cocino las cosas normales, pero nada gourmet. Hago comida rica y normal. Soy más de la limpieza y el orden, más que de la cocina. A Andrés siempre tengo que andar levantándole la ropa. Pero no creo que haya llegado a su vida para ordenarlo, sino que estoy para otras cosas. Por su parte, él me da mucho cariño todo el tiempo, es un divino y estoy re contenta con él. No tengo quejas al respecto".
Sobre futuras propuestas laborales Breque admite que le interesaría participar de la competencia televisada de baile "Bailando por un sueño", aunque debería pensarlo bien por la exposición que significa.
"Si la puedo llevar como fan a Melanie, mi hermana, sí (risas). En el verano, cuando lo vi a Marcelo no me hizo ningún ofrecimiento, sólo nos juntamos a pasar una tarde divertida en su casa, comimos un asado y nada más que eso", contó la joven rubia y aseguró que la posibilidad le interesa mucho: "Para mí es la mejor producción de la televisión argentina, más allá del prejuicio, pero es un gran show. Por ese motivo, yo aceptaría, aunque tendría que pensar el tema de la exposición junto con la agencia. Recibo muchas ofertas pero digo que no porque prefiero ir por otro camino. Pero creo que a las peleas del jurado les pondría alegría y buen humor".
Sobre cuánto la beneficia y la perjudica ser novia de Calamaro, aseguró: "No tengo eso presente, sólo pienso en lo que me gusta hacer, como lo hice desde los 17 años que empecé a trabajar. Tengo 23 años y nunca dejé de hacer cosas. Cuatro o cinco años pareció mucho tiempo por todo lo que hice, y lo de Andrés no me puede molestar porque es una realidad. Si estuviera en el "Bailando?" y saliera ese tema, le pondría mi buen humor y me reiría de todo. Soy de desdramatizar la vida. Me gusta disfrutar de las cosas y si puedo llevar esa filosofía al trabajo sería excelente".
Además, Breque habló sobre la diferencia de edad y aseguró que no lo tiene en cuenta porque no lo nota: "No me doy cuenta de la diferencia de edad. Casi no existe ese tema en general. Cada vez conozco menos casos. A muchas chicas de mi edad les pasa lo que me pasa a mí. Los chicos de mi edad son un desastre. El amor no pasa por un número de documento, sino por qué tipo de vida querés llevar".
La rubia asegura que el rol de conejita es exclusivo de su trabajo. Cuando vuelve al hogar después de un arduo día laboral como modelo y actriz, Micaela es una chica común que disfruta de las tareas diarias de cocinar, limpiar y ordenar.
"Cuando trabajo soy conejita, pero cuando llego a mi casa ya no. Nunca me imaginé que iba a terminar en ese lugar. Al principio me costó, pero después me animé porque soy muy lanzada".
La vida común de pareja con el cantante varía según los días: "No somos rutinarios. Yo soy menos rutinaria que él, hago muchos castings y tomo clases de jazz contemporáneo, por placer. Entre una cosa y otra voy y vengo todo el día y él está siempre tranquilo entre nuestra casa de Benavídez y la de Capital Federal".
Y añadió: "Cocino las cosas normales, pero nada gourmet. Hago comida rica y normal. Soy más de la limpieza y el orden, más que de la cocina. A Andrés siempre tengo que andar levantándole la ropa. Pero no creo que haya llegado a su vida para ordenarlo, sino que estoy para otras cosas. Por su parte, él me da mucho cariño todo el tiempo, es un divino y estoy re contenta con él. No tengo quejas al respecto".
Sobre futuras propuestas laborales Breque admite que le interesaría participar de la competencia televisada de baile "Bailando por un sueño", aunque debería pensarlo bien por la exposición que significa.
"Si la puedo llevar como fan a Melanie, mi hermana, sí (risas). En el verano, cuando lo vi a Marcelo no me hizo ningún ofrecimiento, sólo nos juntamos a pasar una tarde divertida en su casa, comimos un asado y nada más que eso", contó la joven rubia y aseguró que la posibilidad le interesa mucho: "Para mí es la mejor producción de la televisión argentina, más allá del prejuicio, pero es un gran show. Por ese motivo, yo aceptaría, aunque tendría que pensar el tema de la exposición junto con la agencia. Recibo muchas ofertas pero digo que no porque prefiero ir por otro camino. Pero creo que a las peleas del jurado les pondría alegría y buen humor".
Sobre cuánto la beneficia y la perjudica ser novia de Calamaro, aseguró: "No tengo eso presente, sólo pienso en lo que me gusta hacer, como lo hice desde los 17 años que empecé a trabajar. Tengo 23 años y nunca dejé de hacer cosas. Cuatro o cinco años pareció mucho tiempo por todo lo que hice, y lo de Andrés no me puede molestar porque es una realidad. Si estuviera en el "Bailando?" y saliera ese tema, le pondría mi buen humor y me reiría de todo. Soy de desdramatizar la vida. Me gusta disfrutar de las cosas y si puedo llevar esa filosofía al trabajo sería excelente".
Además, Breque habló sobre la diferencia de edad y aseguró que no lo tiene en cuenta porque no lo nota: "No me doy cuenta de la diferencia de edad. Casi no existe ese tema en general. Cada vez conozco menos casos. A muchas chicas de mi edad les pasa lo que me pasa a mí. Los chicos de mi edad son un desastre. El amor no pasa por un número de documento, sino por qué tipo de vida querés llevar".