Boudou: "Chau FMI, tus recomendaciones no las queremos"

"Las decisiones del la Argentina se toman en la Argentina", sostuvo con ironía el funcionario, tras recordar que el país se desentendió del organismo cuando el Gobierno de Néstor Kirchner saldó la deuda que tenía por unos 10.000 millones de dólares en efectivo en 2005.

Tras participar en el lanzamiento del Programa 2010-2014 del Museo de la Deuda externa, Boudou adelantó que la Argentina llevará a la próxima cumbre del G-20 una posición propia y se mantendrá al margen de la discusión que los países desarrollados pretenden llevar adelante.

Los países desarrollados llegarán a la Cumbre, que se realizará a mediados de noviembre en Seúl, ávidos por discutir sobre la denominada "guerra de divisas", pero la Argentina insistirá con su reclamo por descentralizar los organismos multilaterales de crédito, como el FMI.

"Argentina podrá mantenerse al margen de esta discusión porque tiene mucha solidez fiscal, existen gran cantidad de reservas en el Banco Central y también hay superávit comercial", indicó este mediodía Boudou, al descartar estar preocupado por lo que pasa con las monedas a nivel mundial.

La presidente Cristina Kirchner viene planteando desde antes de la explosión de la crisis mundial que los organismos deben flexibilizar sus políticas, ayudando a los países emergentes y pequeños, y no imponiendo medidas fronteras adentro de las naciones sobre las que tiene influencia.

En ese sentido, el ministro destacó que con el pago de la deuda al Fondo, en 2005, la Argentina dijo "chau FMI, tus recomendaciones no las queremos" y remarcó que desde entonces "las decisiones de Argentina se toman en Argentina".

Dejó entrever el ministro que el país no aceptará que el Fondo revise sus cuentas públicas y echó por tierra las versiones que señalaban preocupación oficial por una presunta sanción del organismo contra la Argentina, que es miembro junto a otros 184 países.

"Escribieron (los diarios) que la Argentina iba a ser castigada por el FMI y la verdad es que el Fondo ya nos castigó demasiado con Martínez de Hoz, Cavallo, el corralito, la quita del 13 por ciento en las jubilaciones y los sueldos estatales, el uno a uno y la privatización del sistema jubilatorio a través de las AFJP", cuestionó.

Boudou era escuchado por sus pares de Educación, Alberto Sileoni, y de Industria, Débora Giorgi, y el vicerrector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Alberto Barbieri, en el Museo de la Deuda Externa.

Allí, el ministro agregó que "los cambios (en materia económica) no tienen sentido si no hay una ideología atrás", porque "la economía debe estar subordinada a la política para que sirva para algo".

Dijo también que para el Gobierno "el trabajo es el valor central de la economía" y señaló que "nuestro modelo es el del crecimiento con inclusión social, cuidando el superávit fiscal y el comercial y las reservas, el desendeudamiento" y el desarrollo tanto "del campo como de la industria".