Bermúdez y Jara, otra vez detenidos
Los dos principales imputados por el crimen de Candela Sol Rodríguez, la nena de 11 años asesinada en 2011 en Hurlingham, volvieron a quedar presos.
Hugo Bermúdez (54) y Leonardo Jara (35), los dos principales imputados por el crimen de Candela Sol Rodríguez, la nena de 11 años asesinada en 2011 en Hurlingham, volvieron a quedar detenidos en el marco de la causa, informaron hoy fuentes judiciales.
Las detenciones se dieron por pedido del fiscal de Morón Mario Ferrario y decisión del juez de Garantías Gustavo Robles, a partir del fallo de la Sala IV del Tribunal de Casación bonaerense, que la semana pasada anuló un fallo que los había liberado.
Bermúdez fue detenido en su domicilio, mientras que Jara, que ya está preso por otra causa de homicidio, quedó formalmente notificado en el penal.
El viernes pasado, la Sala IV de Casación, con la firma de los jueces Mario Kohan y Carlos Natiello, anuló por "arbitraria" la resolución de la sala III de la Cámara de Apelaciones de Morón, que había revocado las prisiones preventivas de Bermúdez y Jara en esta causa el 12 de junio de 2013.
En la parte resolutiva, los jueces de Casación dispusieron declarar nula la resolución que liberó a Bermúdez y a Jara y ordenó apartar a la sala III de la Cámara de Morón de la causa.
Como todo se retrotrajo a lo que pasaba en junio de 2013, el fiscal Ferrario y el juez Robles detuvieron nuevamente a Bermúdez y Jara, y ahora serán otros jueces de Cámara los de definan las apelaciones de sus defensas.
El fiscal Ferrario ya pidió que la causa Candela sea elevada a juicio con cinco imputados: Jara (35), Bermúdez (54), Fabián Gómez (43), Néstor Altamirano (56) y Gladys Cabrera (43).
A todos les imputa el delito de "privación ilegal de la libertad seguida de muerte", aunque les atribuye distintos roles en el hecho.
Candela fue vista con vida por última vez el 22 de agosto de 2011, cuando esperaba a unas amigas para ir a la reunión del grupo de boy scouts al que pertenecía, y el 31 de agosto del mismo año apareció asfixiada dentro de una bolsa, a 30 cuadras de su casa.