Bate récord con una bicicleta no convencional
En esta extraña bicicleta que parece una cápsula espacial, alcanzó los 91,1 km por hora.
Graeme Obree, escocés de 48 años y excampeón mundial de ciclismo, logró batir su propio récord de velocidad montado en una bicicleta construida -entre otras cosas- con una olla de acero inoxidable, pedazos de bicicletas y patines viejos.
El extraño móvil casero que bautizó como "Beastie", le permitió a Obree alcanzar los 91,1 km por hora mientras lo comandaba en posición decúbito ventral. O sea que el deportista la conduce acostado boca abajo, con la barbilla a dos centímetros de la rueda delantera y mirando el camino a través de una mirilla en la parte delantera.
"Creo que un ser humano en perfectas condiciones físicas, con aerodinámicas perfectas, el sistema de manejo perfecto, perfectas condiciones atmosféricas y de viento, puede llegar a los 160 kilómetros por hora", había declarado Obree con cierto optimismo antes de lograr lo que no deja de ser una hazaña.