Balearon a un remisero y a su hija de dos años
Un grupo de sujetos atacó a balazos a un remisero cuando abrió la puerta de su casa, ubicada en el barrio platense de Villa Elvira, hiriéndolo a él y a la pequeña hija de su pareja, una nena de dos años.
Los atacantes -quienes hasta el momento no habían sido identificados- efectuaron un disparo hacia el piso, que impactó en una rodilla del remisero y luego le provocó un roce en un tobillo a la hija de su pareja.
Luego, los agresores escaparon de la vivienda y hasta el momento permanecían prófugos, mientras los investigadores del caso tratan de establecer cuáles fueron las motivaciones del ataque.
Según trascendió, los atacantes entraron a la vivienda, recorrieron varios metros del pasillo y tocaron directamente la puerta del departamento donde vive la víctima junto a su pareja y la hija de ésta.
Apenas el remisero abrió la puerta, uno de los sujetos, que ya tenía el arma de fuego en la mano, disparó en dirección al piso, se señaló en el diario El Día de esta ciudad.
Como consecuencia de las heridas sufridas, tanto el hombre como la pequeña de dos años tuvieron que ser internados, indicaron fuentes del caso.
Los voceros creen que la bala, que podría ser de un arma calibre 9 milímetros, atravesó la pierna del hombre y rozó el tobillo de la nena.
El episodio se produjo cerca de las 15:00 de ayer, en una vivienda de la calle 81 entre 20 y 21, en esta ciudad.
Los sujetos, de acuerdo con los testimonios con que cuenta la Policía, llegaron al lugar en una moto, que dejaron estacionada en la puerta de la vivienda.
Los investigadores creen que el ataque tuvo como móvil "cuestiones personales" que aún no fueron dilucidadas.
La víctima fue identificada como Ernesto Pafundi (de 40 años), quien luego de sufrir la agresión fue trasladado al hospital San Martín, mientras que la menor fue derivada al Hospital de Niños de esta ciudad.
Los investigadores creen, por la dirección de la bala, que los atacantes no fueron a matarlo. "Lo tuvieron de frente y a no más de un metro. Lo pudieron haber matado", señaló uno de los
investigadores.
Más tarde y en medio de las pericias de la Policía Científica, los detectives hallaron en la casa de Pafundi un arma de fuego calibre 32, que quedó secuestrada en la causa.
Al momento del ataque en la casa también estaba la madre de la niña y pareja del hombre baleado, aunque resultó ilesa.
Luego, los agresores escaparon de la vivienda y hasta el momento permanecían prófugos, mientras los investigadores del caso tratan de establecer cuáles fueron las motivaciones del ataque.
Según trascendió, los atacantes entraron a la vivienda, recorrieron varios metros del pasillo y tocaron directamente la puerta del departamento donde vive la víctima junto a su pareja y la hija de ésta.
Apenas el remisero abrió la puerta, uno de los sujetos, que ya tenía el arma de fuego en la mano, disparó en dirección al piso, se señaló en el diario El Día de esta ciudad.
Como consecuencia de las heridas sufridas, tanto el hombre como la pequeña de dos años tuvieron que ser internados, indicaron fuentes del caso.
Los voceros creen que la bala, que podría ser de un arma calibre 9 milímetros, atravesó la pierna del hombre y rozó el tobillo de la nena.
El episodio se produjo cerca de las 15:00 de ayer, en una vivienda de la calle 81 entre 20 y 21, en esta ciudad.
Los sujetos, de acuerdo con los testimonios con que cuenta la Policía, llegaron al lugar en una moto, que dejaron estacionada en la puerta de la vivienda.
Los investigadores creen que el ataque tuvo como móvil "cuestiones personales" que aún no fueron dilucidadas.
La víctima fue identificada como Ernesto Pafundi (de 40 años), quien luego de sufrir la agresión fue trasladado al hospital San Martín, mientras que la menor fue derivada al Hospital de Niños de esta ciudad.
Los investigadores creen, por la dirección de la bala, que los atacantes no fueron a matarlo. "Lo tuvieron de frente y a no más de un metro. Lo pudieron haber matado", señaló uno de los
investigadores.
Más tarde y en medio de las pericias de la Policía Científica, los detectives hallaron en la casa de Pafundi un arma de fuego calibre 32, que quedó secuestrada en la causa.
Al momento del ataque en la casa también estaba la madre de la niña y pareja del hombre baleado, aunque resultó ilesa.