Aumentó 10 por ciento la desaprobación de la gestión de Cristina por las ocupaciones

Una encuesta de la consultora Management & Fit muestra las primeras repercusiones en la sociedad porteña de la crisis habitacional que desató la toma que Parque Indoamericano.

Según esta consultora, casi el 60 por ciento de los encuestados cree que las tomas de predios públicos y privados debería solucionarse "desalojando como marca la ley". El 21,4 por ciento cree que la solución está en otorgar "lo que piden" a las familias que ocupan las tierras.

Los consultados también descreen de las teorías conspirativas que fogonearon ambos sectores políticos al alegar que las tomas fueron incentivadas por grupos kirchneristas enfrentados al macrismo –como sostenían desde el gobierno porteño- o por el duhaldismo –como sugirieron desde el Gobierno Nacional-. El 42,2 por ciento de los encuestados creen que las tomas fueron espontáneas y el 26,4 por ciento cree que fueron "fogoneadas" por sectores políticos.

Para la mayoría, además, ninguno de los gobiernos salió mejor posicionado del conflicto que originó la toma del Parque Indoamericano en Villa Soldati y Lugano y que se extendió días más tarde a otros puntos de la ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense.

La mayoría de los encuestados desaprueba tanto el accionar de Mauricio Macri como el de Cristina Fernández de Kirchner. El 46,5 por ciento no está de acuerdo con la actitud tomada por el jefe de Gobierno porteño mientras que el 60,3 por ciento rechaza la postura de la Presidenta.

Según los resultados de Management, si bien la mayoría desaprueba a ambos dirigentes, el porcentaje de encuestados que sí aprueba la actitud de Macri es 14 puntos mayor al que aprueba a Cristina.

En cuanto a los cambios de Gabinete realizados por la primera mandataria, la mayoría cree que la creación del Ministerio de Seguridad, al mando del cual fue nombrada la ex ministra de Defensa Nilda Garré, no resolverá el problema de las tomas. Así lo consideró el 41,2 por ciento de los sondeados, mientras que sólo el 19,5 por ciento tiene esperanzas puestas en los cambios promovidos por Fernández de Kirchner la semana pasada.

Gestión. En comparación con encuestas anteriores, realizadas por la misma consultora, la aprobación a la gestión de Macri subió unos pocos puntos desde mayo (cuando tenía el 35,4 por ciento). Mientras que en noviembre llegó a los 38 puntos, en diciembre creció 1,2 por ciento más. Pero la desaprobación a su gobierno también se incrementó. De hecho, bajó unos puntos en noviembre (pasó de los 53,2 a los 49), pero volvió a trepar este mes, con el 51,9 por ciento de desaprobación.

En cuanto a la gestión de Fernández, los niveles de aprobación eran muy bajos en mayo (33,1 por ciento), aún más bajos en agosto (22,4 por ciento), pero lograron trepar hasta el 43 por ciento en noviembre, mes en el que murió el ex presidente Néstor Kirchner. Lo mismo pasó con el nivel de desaprobación a la gestión de Cristina. En mayo era del 60,1 por ciento. Un mes después subió hasta el 70,7 por ciento, pero en noviembre el nivel de desaprobación bajó hasta el 42,7 por ciento. Este mes, en cambio, volvió a incrementarse, hasta alcanzar los 52,1 puntos porcentuales.

La encuesta fue realizada el martes y miércoles entre 800 ciudadanos porteños. El sondeo tiene un nivel de confianza del 95 por ciento.

Responsabilidad compartida. Otra encuesta realizada por la Universidad de La Matanza asegura que el 46,6 por ciento de los encuestados –unos 500 casos en la ciudad de Buenos Aires- cree que la responsabilidad por la crisis por las tomas de tierras es de ambos gobiernos, tanto el porteño como el Nacional.

En cuanto a los hechos de violencia, el 60 por ciento de los consultados no está de acuerdo con los intentos de desalojo protagonizados por civiles de esos barrios.

En esta encuesta, sin embargo, la mayoría (un 33,6 por ciento) cree que la seguidilla de tomas fue una "operación" para perjudicar a Mauricio Macri. Un 21,7 por ciento cree que fue una "maniobra para perjudicar a ambos" gobierno, en referencia al porteño y al Nacional.

La encuesta también arrojó resultados que confirman un alto nivel de xenofobia en los consultados: el 44,6 por ciento cree que la solución del Estado ante los extranjeros es "mandarlos de vuelta a su país".