Audio - La casi tragedia que sucedió en aeroparque Jorge Newbery y de la que nadie sabe nada
Un vuelo debía despegar cuando había otro avión en la pista. El accidente no ocurrió de milagro.
El martes 15 de Mayo de 2018, pasadas las 23, el vuelo número 7622 de LanArgentina con destino a Córdoba se disponía a despegar pero un desperfecto puso en peligro a los pasajeros y a toda la tripulación.
Era un Airbus320 con capacidad para un poco más de 200 pasajeros, más la tripulación de la aeronave, que estaba autorizado por la torre de control del Aeroparque Jorge Newbery para comenzar viaje por la pista 13.
Mientras finalizaba la jornada con mayores arribos que despegues, algo ocurrió en la torre de control que generó un desajuste entre las frecuencias. Fue precisamente cuando una aeronave de Aerolíneas aterrizó y fue instruida a abandonar la pista, cuando se autorizó el despegue del vuelo LanAr7622.
Las luces de la Ciudad muchas veces generan confusión en los pilotos, que deben agudizar su visión para realizar las maniobras pertinentes. Tal fue el caso del piloto del 7622, quien se sorprendió al ver, después de iniciar la carrera de despegue, que a escasos metros había otra aeronave cruzada.
¡La pista no estaba libre para el despegue!
Inmediatamente interrumpió su maniobra súbitamente, cuando ya iba a 200 km/h e incrementando velocidad en segundos. El comandante informó lo ocurrido al controlador y pidió la grabación para poder labrar un acta con lo sucedido.
Fuentes que prefirieron mantenerse en reserva, explicaron a este portal que es una medida "para notificar este incidente a todas las autoridades involucradas, para tomar cartas en el asunto y evitar que este tipo de incidente vuelva a ocurrir con el riesgo de producirse una catástrofe".
"De haber ocurrido un incidente, hubiera sido fatal", remarcaron preocupadas las fuentes. Si bien estamos ante un error humano, el debate que se dio puertas adentro fue la necesidad de mejorar un sector que se deteriora cada vez más y donde las consecuencias pueden ser lamentables.
"Hay frecuencias aeronáuticas que no funcionan, radares que se cortan de manera recurrente, falta de capacitación, falta de una infraestructura acorde". Todos, condimentos necesarios para que el vuelo 7622 casi termine, irremediablemente, en un accidente aéreo.