Asalto con toma de rehenes en La Plata
El hecho cuando dos delincuentes ingresaron a una casa y tomaron a una familia de rehenes.
Dos delincuentes armados asaltaron a una familia en su casa de La Plata y, al verse rodeados por la policía, tomaron como rehenes a una mujer y su hija, aunque finalmente fueron detenidos, informó hoy una fuente de la fuerza.
El hecho ocurrió ayer, cuando un hombre, identificado como Roberto Echeverría, se aprestaba a ingresar a su casa, ubicada en la calle 43, entre 17 y 18, tras pasear a su perro, y fue interceptado por dos delincuentes armados.
Los ladrones lo obligaron a ingresar a la vivienda, donde lo redujeron junto a su esposa y su hija.
Un hijo del matrimonio que se hallaba en el baño oyó los gritos de los delincuentes al ingresar a la casa, por lo que dio aviso al 911 con su celular y permaneció escondido durante todo el asalto.
Los delincuentes exigieron a sus víctimas la entrega de dinero, y hasta llegaron a tomar del cabello a la mujer del dueño de casa.
Las fuentes explicaron que en esas circunstancias un móvil policial llegó a la casa y al detectar que en el interior estaban aún los delincuentes, varios efectivos descendieron y lograron ingresar a la finca por el garaje.
Al advertir la presencia policial, los delincuentes intentaron forzar un portón para escapar, pero al no poder lograrlo tomaron como rehenes a madre e hija.
Desesperados, los ladrones efectuaron varios disparos y, tras un breve tiroteo con la policía, finalmente se entregaron y quedaron detenidos.
El hecho ocurrió ayer, cuando un hombre, identificado como Roberto Echeverría, se aprestaba a ingresar a su casa, ubicada en la calle 43, entre 17 y 18, tras pasear a su perro, y fue interceptado por dos delincuentes armados.
Los ladrones lo obligaron a ingresar a la vivienda, donde lo redujeron junto a su esposa y su hija.
Un hijo del matrimonio que se hallaba en el baño oyó los gritos de los delincuentes al ingresar a la casa, por lo que dio aviso al 911 con su celular y permaneció escondido durante todo el asalto.
Los delincuentes exigieron a sus víctimas la entrega de dinero, y hasta llegaron a tomar del cabello a la mujer del dueño de casa.
Las fuentes explicaron que en esas circunstancias un móvil policial llegó a la casa y al detectar que en el interior estaban aún los delincuentes, varios efectivos descendieron y lograron ingresar a la finca por el garaje.
Al advertir la presencia policial, los delincuentes intentaron forzar un portón para escapar, pero al no poder lograrlo tomaron como rehenes a madre e hija.
Desesperados, los ladrones efectuaron varios disparos y, tras un breve tiroteo con la policía, finalmente se entregaron y quedaron detenidos.