Arturo Bonín y el final de Dulce Amor: "Voy a extrañar a Carina, es como una hija"

-La verdad es que hay una mezcla de nostalgia y alegría, porque lo que pasó con la tira fue algo inédito. Por un lado, siento una alegría inmensa de haber hecho esta novela durante quince meses, pero por el otro, una pena por no ver más a los compañeros. Hubo un clima de trabajo excelente, increíble, es notable lo que nos ha pasado a todos, la buena onda y el buen clima. He integrado varios elencos y es notable lo que nos pasó a todos en "Dulce...".

Además, el tema con la gente joven que se incorporó al elenco es que son muy serios, tenían todos una gran disciplina en el trabajo y entonces era un placer interactuar con ellos.

- ¿Cómo es José "Pepe" Fernández, su personaje en la tira?

- Pepe es un conciliador, su objetivo fue siempre aflojar las tensiones, y ayudar recuperar la felicidad de su hija, Victoria Fernández (Carina Zampini). Y Marcos( Sebastián Estevanez) es su hijo adoptivo, Pepe le dio líneas generales de vida porque lo conoce desde chico.

- ¿Y cómo es su relación con Carina Zampini y Sebastián Estevanez?

-Con Carina ya habíamos trabajando juntos y "Dulce..." fue un muy buen encuentro. La voy a extrañar mucho, ella es como mi hija realmente. La relación fue siempre muy buena y el vínculo también.

Y con Sebastián, me encantaría hacer de su enemigo alguna vez (risas). Lo conozco desde chico y siempre fue excelente la relación. Ojalá algún día me toque hacer de su enemigo, aunque no sé como voy a hacerlo porque él es un seductor (risas). Además, nunca me tocó de hacer de padre, solo en un piloto, que finalmente nunca salió al aire.

- Con Georgina Barbarosa y María Valenzuela con quien compartió la mayoría de las escenas: ¿Cómo fue el vínculo?

-Con Georgina fue muy divertido ya que nos conocemos desde hace muchos años. Y con Mariquita muy bien, nunca habíamos tenido la oportunidad de compartir un proyecto donde funcionáramos como pareja. Y les adelanto que Pepe y Elena tendrán un final esperado por muchos... La idea del final, es que los dos dejen de sufrir después de 35 años de penuria.

-¿Qué opina de la repercusión del público y del fanatismo que surgió de la novela sobre todo por la pareja protagónica?

- Cuando en la calle te dicen "Pepe" en vez de Arturo, es porque la novela anda bien, significa que la cosa funciona. La recepción fue buenísima. Cada vez que terminábamos de grabar en los estudios "Pampa", en la puerta estaba lleno de gente esperándonos. Después de varias horas de sacarse fotos y firmar autógrafos, Carina, un par de veces  tuvo que salir escondida en el baúl del auto, porque no podía llegar a otro lugar. Era la única forma que podía salir del estudio. Por supuesto, sin despreciar el esfuerzo de toda esa gente, pero a veces tenía que llegar sí o sí a otro lugar, y no podía irse. ¡Es impresionante lo que pasó!  

-¿Qué nos puede adelantar del "gran final", de la fiesta de cierre?

-Venimos programando hace mucho el último encuentro por mail. Estamos todos preguntándonos qué nos ponemos, si ir vestidos como el personaje o de civil. Va a ser una gran fiesta, un encuentro afectuoso, alegre, una forma de darle un punto, un cierre a este trabajo que fue redondo. Yo les dije a todos: "Ya nos volveremos a encontrar, y revivir todo lo que vivimos en otro lugar, en otro elenco".