Arde Racing: "Cogorno fue mi más profundo error"

El vicepresidente primero de Racing, Rodolfo Molina, aseguró hoy que "de ninguna manera" va a renunciar tal como le pidió su rival interno y titular del club, Gastón Cogorno, a quien consideró su "más profundo error" político por haberlo fogoneado para que se haga cargo de la institución dos años atrás.

Molina acusó a Cogorno de todos los males en esta crisis institucional del club que dio hoy otra vuelta de tuerca y que amenaza con instalar un poder bifronte.

Cogorno comunicó ayer por la tarde por la inusual vía de la red social Twitter que ponía a disposición su renuncia y dijo que a cambio esperaba el mismo proceder de Molina y del vice segundo, Víctor Blanco, para llamar anticipadamente a elecciones democráticas.

Racing marcha último en el torneo local, con dos puntos, ocho derrotas y sin haber ganado en lo que va del semestre. De candidato, el equipo pasó a estar a sólo quince puntos de la zona del descenso. Al romper el silencio por el canal Fox Sports, Molina rechazó el convite aunque también reconoció que le sugirió que dé "un paso al costado" a Cogorno, quien se quedó casi sin sostén interno y sólo con el apoyo del secretario general Christian Devia tras la secuencia de renuncias de sus aliados la semana pasada.

Así las cosas, si Cogorno continúa en el cargo la interna continuará luego de una jornada ríspida en la que barras hicieron presencia de fuerza en la sede de Avellaneda, donde se hicieron de la computadora del contador Silvio Espósito.

"Que Cogorno haga lo que quiera. Yo me comprometí a trabajar por Racing con transparencia, honestidad y gestión", respondió Molina en el caso de que el presidente siga en el cargo.
Hizo también un mea culpa por haber fogoneado al actual presidente para darle continuidad a su gestión anterior: "Cogorno fue un profundo error mío".

Sorprendió Molina al afirmar que "a la semana" de haber asumido Cogorno, cambió el rumbo.
Molina acusó a Cogorno de gobernar el club "con amigos con un perfil más violento que profesional" y de guiarlo como "un club chico".

Cuestionó que tras el homicidio del periodista partidario Nicolás Pacheco a principios de este año continuó el mismo gerente de la sede de Villa del Parque, en referencia a Rubén Guevara, cogornista, quien renunció recién días atrás.

También cuestionó las contrataciones de refuerzos, como los de Mario Bolatti, y los altos gastos en las contrataciones.

Dijo que no se debió haberle renovado el contrato a Luis Zubeldía ni insistir en mantener como manager a Roberto Ayala, quien renunció la semana pasada con Racing hundido en la tabla de posiciones.

Molina, quien rechazó que se lo haya acusado de golpista, como lo hizo el renunciante secretario cogornista Leandro Fernández Hevia, la semana pasada, recordó el cortocircuito que tuvieron Cogorno y Zubeldía en el vestuarios tras el tan oscuro como sospechado partido ante Quilmes, entonces rival directo de Independiente por la permanencia en el torneo Final.

"El problema de Racing hoy no es la pelea política, hoy tenemos que trabajar para que Racing salga de esta crisis futbolística. Racing está último con dos puntos y si seguimos así vamos a seguir el camino de otros clubes grandes como Independiente y River, que no vieron la problemática a tiempo", evaluó y prometió que a fin de año contratará "dos refuerzos" de jerarquía para pelear el próximo campeonato.

Fuente: Diarios y Noticias