Apareció la foto del arma casera que mató a Lily Sullos y su hermano
Se trata de una "joya de la ingeniería", según confirmaron los peritos que analizaron el material fabricado por Luis, con el que mató a la astróloga y luego se suicidó.
La muerte de Lily Sullos y su hermano, a través de un siniestro y sangriento pacto suicida, se produjo con un arma casera que este fin de semana se dio a conocer en la revista Noticias. "Inteligencia mortal" es la nota que muestra la "joya de la ingeniería casera", que le quitó la vida a los hermanos Sullos.
Luis -el hermano de la astróloga- la fabricó para terminar con la vida de su hermana y la suya, tal como habían decidido que sucedería cuando uno de los dos no estuviese en condiciones de seguir viviendo.
El hombre utilizó un caño de espesor de una escopeta para balas calibre 32. Se la compara con un "arma tumbera", pero ésta fue mucho más sofisticada. "Detalles que se ganaron la admiración de los peritos" dice la nota.
Un caño torneado y pulido, un silenciador casero, piezas de hierro torneado, chapa soldada en "L", empuñadura y cavidad de tensión fueron fabricadas por el hermano de Lily Sullos, según relata y muestra en un gráfico la revista. Calculó los efectos peligrosos de que el disparo puediese salir hacia atrás, y lo hizo milimétricamente para no fallar, sobre todo en el segundo disparo con el que se suicidó.
"Todo estuvo fríamente pensado" y realizado con el afán de no fallar. Y no falló.
Luis -el hermano de la astróloga- la fabricó para terminar con la vida de su hermana y la suya, tal como habían decidido que sucedería cuando uno de los dos no estuviese en condiciones de seguir viviendo.
El hombre utilizó un caño de espesor de una escopeta para balas calibre 32. Se la compara con un "arma tumbera", pero ésta fue mucho más sofisticada. "Detalles que se ganaron la admiración de los peritos" dice la nota.
Un caño torneado y pulido, un silenciador casero, piezas de hierro torneado, chapa soldada en "L", empuñadura y cavidad de tensión fueron fabricadas por el hermano de Lily Sullos, según relata y muestra en un gráfico la revista. Calculó los efectos peligrosos de que el disparo puediese salir hacia atrás, y lo hizo milimétricamente para no fallar, sobre todo en el segundo disparo con el que se suicidó.
"Todo estuvo fríamente pensado" y realizado con el afán de no fallar. Y no falló.