Año Nuevo: el falso “borrón y cuenta nueva”
Las personas suelen relacionar el Año Nuevo con una fecha para proponerse nuevas metas.
Las personas ven las fiestas como un final de ciclo conformado por 365 días en el que cada uno tuvo las posibilidades para evaluar y revalidar comportamientos, metas, y actitudes frente a la vida. Cuando llega Año Nuevo, la formulación de nuevas metas, la reconciliación con el prójimo, la recarga de energía y la visión más despejada sobre la realidad que estará por venir suelen ser algunas de las cosas que uno se plantea al llegar el 31 de diciembre a la noche.
Ahora bien, ¿por qué nos sentimos más motivados para mejorar y cambiar nuestras vidas solo el 1ro de enero?
Durante el año está lleno de momentos en los que nos agarra la chispita del “yo puedo hacerlo”, generalmente ocurre un lunes, al inicio de mes, al inicio de una estación, al regresar de las vacaciones. A este “factor” se lo conoce como “hitos temporales” que juegan un papel importante al momento de emprender retos personales, según un estudio realizado por los académicos H. Dai, K.L, Milkman y J. Riss.
“Los hitos temporales, incluyendo los que tienen un sentido personal, demarcan un espacio en el tiempo y abren nuevas cuentas mentales”.
Si vamos al caso, el 1ro de enero es un día más, tiene 24 horas como el resto, pero no lo percibimos como tal. “La forma de percibir al Año Nuevo está relacionada con nuestra forma occidental de experimentar el tiempo y el espacio” comentó el sociólogo Tuti Campos.
“Las personas tienen la necesidad de construir puntos de reinicio y recomienzo de la vida”, agregó el sociólogo. La vida es un abrir y cerrar ciclos constante; buscamos fechas, hitos, momentos especiales; pero realmente no se trata del “Año Nuevo” que no deja de ser un simbolismo. Las personas damos vuelta la página cada segundo, cada vez que tomamos decisiones.
Por estos motivos, es importante entender que el punto no pasa por “una fecha puntual” sino más bien en saber aprovechar los momentos de motivación. Si queremos mejorar nuestra salud, nuestras finanzas o las metas incumplidas, el “borrón y cuenta nueva” pasa por pensar estratégicamente y elegir el momento adecuado para cambiar de hábitos.
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