Ana María Polo: "Los argentinos son mis litigantes favoritos"
La jueza reveló intimidades del talk show del momento, cómo se prepara y cuál es la fórmula del éxito del programa.
La vehemencia y el carisma de Ana María Polo convirtieron a su programa Caso Cerrado en un fenómeno televisivo y está a punto de cumplir 16 años al aire. Tras conducir un Talk Show llamado Sala de Parejas, la jueza más famosa decidió que era hora de virar hacia nuevos horizontes. Así nació este programa que representa grandes ratings en la pantalla chica y le da espacio a lo bizarro, al drama y a la sorpresa. En una entrevista, la doctora habló sobre este fenómeno, su preparación y los casos más conmovedores.
"Los argentinos son mis litigantes favoritos porque tienen un nivel de naturalidad que para mí es tan refrescante... Yo no me doy cuenta cuando alguien está actuando o está diciendo la 'en mi programa, pero los argentinos son tan sinceros que a mí 'me piace molto" tenerlos en la sala", reveló la jueza.
"Me encanta la humanidad, los seres humanos, sus tradiciones, su comida, y la Argentina es un lugar que he visitado en muchas ocasiones. Es un país precioso, de gente cálida, creativa y seductora, y me encantaría hacer Caso Cerrado allí", reflexionó Polo en diálogo con La Nación.
Ana María tuvo una formación teatral antes de dedicarse a la abogacía y contó cuánto hay de la actriz que lleva adentro en sus reacciones en el programa: "Pienso que cualquier persona que trabaja en televisión, por más que evite actuar o quiera convencerse de que no está haciéndolo, se está engañando. Todos los que trabajamos frente a una cámara de televisión estamos actuando en cierto nivel. Y hay una realidad: la cámara no ama a todo el mundo. Me di cuenta con mis participantes; a veces veo gente bellísima que pasa por el programa y cuando los miro en el monitor, esa belleza no se refleja. Es algo que va más allá del control de uno; es algo que se tiene o no se tiene".
"Tuve el caso de una chica que se quería casar con un muerto. En realidad, su novio se había muerto en un accidente cuando estaban a punto de celebrar su boda y ella quería casarse con él de todos modos. Me pareció muy bizarro, y además la participante me pareció muy genuina. Y he tenido tantos casos dolorosos...", recordó.
"Creo que ese es el motivo por el que llego a cada día de grabación contenta y ansiosa por saber qué caso tendré que atender. Todavía no pierdo esa curiosidad por el conflicto humano y por cómo viene vestido, porque cada conflicto viene en su propio paquete".
"Voy al set y no sé lo que va a pasar. Eso es parte de la magia. Entonces yo tengo que saber cómo encarar un tema, cómo indagar y hacer preguntas relevantes sobre lo que estamos discutiendo. Todo eso es parte de la fórmula del programa".